10 julio 2013

EL FÚTBOL EN ESPAÑA VA A CAMBIAR (TIENE QUE CAMBIAR)

Hace casi un año publiqué un artículo en el diario Ideal cuyo título era 'Crisis económica y fútbol'. Unos meses antes publiqué en el mismo periódico 'El fútbol como terapia'. Es más, un par de años antes, el mismo día en el que España se proclamaba campeona del mundo de fútbol en Sudáfrica publicaba otro artículo denominado 'El fútbol como catarsis'  (todos los podéis leer pinchando en el título). Por tanto, no cabe duda que he intentado reflexionar sobre lo que está ocurriendo y lo que podría ocurrir en el mundo del fútbol. Ese mundo que sigue aún encerrado en una burbuja, a pesar de que el país lleva años desangrándose. En todos y cada uno de los artículos criticaba esta situación de proteccionismo y teorizaba sobre el enorme interés que tienen los gobiernos que nada cambie, porque de esa manera, con ese pan y circo, se mantiene entretenida a una enorme masa social votante.
Pero ahora, tal y como ya teorizaba, las cosas ya no se podrán mantener así. Conocimos el 'hachazo' del fisco a Messi y ahora estamos asistiendo a la desaparición de clubes de segunda y categorías inferiores por problemas económicos. Asimismo, nos llegan informaciones que equipos consagrados e internacionales de otros deportes más minoritarios ya han desaparecido o están en vía de desaparecer. Son los casos del Atlético de Madrid de Balonmano, el Caja Segovia de Fútbol Sala y la pronta desaparición de uno de los equipos españoles más competitivos, el Esukatel. Pero el chorreo no se va a detener ahí. En los próximos meses habrá muchos más casos. Las causas son fáciles de comprender: la crisis ha retirado patrocinadores y las instituciones ya no subvenciona. Para colmo, muchos de estos equipos estaban financiados por las obras sociales de las Cajas y al cambiar la normativa y convertirse la mayoría en bancos, la obra social desaparece.
    Sin embargo, aún existe una enorme protección hacia la primera división del fútbol español. Siguen sin estar claras las cuentas en los grandes clubes de nuestro fútbol y existe una fusión de intereses entre los intereses privados y ocultos de sus directivos y los del club mismo. Para colmo, la mayoría tiene enormes deudas con Hacienda, la Seguridad Social y proveedores. Pero no ocurre nada. Lo que sería una persecución para cualquier ciudadano o cualquier empresario de esta país, para los clubes de fútbol no supone problema alguno. Es más, a pesar de que han bajado sus pretensiones en cuanto a fichajes, siguen disparando con pólvora de rey. Un ejemplo, el equipo que más dinero debe a Hacienda de este país, el Atlético de Madrid, aún se permite fichar a uno de los jugadores con más ficha del fútbol español, David Villa. Es demencial. Los ciudadanos deberíamos de sorprendernos -y no lo hacemos demasiado- sobre las cantidades bestiales que cobran los jugadores, aún a sabiendas que sus estratosféricas fichas se mantienen a costa de que sus clubes deban cientos de millones de euros a Hacienda y a la Seguridad Social, que es como decir que están endeudados con el conjunto de los españoles. Porque resulta que mientras que nuestras empresas nos retienen la cantidad pertinente en concepto de IRPF y Seguridad Social, los clubes suelen abonar el total de esos conceptos que, legalmente, le correspondería a los jugadores, ya que se negocian contratos netos de impuestos y Seguridad Social. De ahí esa deuda descomunal que tienen los clubes con el fisco.
     Además, en los países de nuestro entorno dentro de la UE las cosas no son así. Alemania -que es la voz cantante en Europa- cuenta con sistema legal que prohíbe que los clubes no estén saneados y todos se encuentran al día con Hacienda y la Seguridad Social. Y en Inglaterra, los clubes son como franquicias o empresas que hasta cotizan en bolsa en algunos casos. Ninguno depende de instituciones públicas y se financian como cualquier otra empresa que, en este caso, son sus socios y unos derechos televisivos repartidos de manera más ecuánime que en España. Por tanto, es nuestro país uno de los pocos que aún mantiene el sistema proteccionista al fútbol profesional. Lógicamente, la UE está presionando al gobierno español para que eso cambie (incluso hay voces en estos países que vinculan los éxitos del fútbol español a esta situación privilegiada, pero eso sería discutible).
¿Pero por qué el gobierno, las Comunidades Autónomas y los Ayuntamientos siguen permitiendo estas situaciones? Muy fácil: si se mete en cintura a los clubes, la mayoría no podría subsistir y desaparecerían y los políticos no quieren ni por asomo que eso ocurra porque saben que de ocurrir el personal ya no tendría pan y circo y, entonces, sus enormes culos se quedarían aún más al aire.    

09 julio 2013

CINE: 'EL CUERPO' (Esp, 2012)

El cuerpo
No se puede negar que esta película española tiene buena hechura. Buen guión, aceptable dirección, excelente fotografía que capta perfectamente el ambiente claustrofóbico y ciertamente decadente que quiere mostrar, pero dicho esto, en mi humilde opinión, hay demasiadas interpretaciones que no están a la altura. 
Podríamos salvar a Belén Rueda, que ya ha demostrado en más de una ocasión encarna muy bien los personajes que le asignan, pero poco más. Y lo lamento porque con otro tipo de interpretaciones -o tal vez otros interpretes- la película hubiera podido dar más juego, a pesar del obsesivo interés que muestran los guionistas (uno de ellos es el mismo director de la película, Orio Paulo) por girar excesivamente los vericuetos de la historia. Pareciera que compitieran por sorprender permanentemente al espectador y que éste pueda admirar la capacidad imaginativa de éstos a la hora de retorcer el desenlace de la película, pero eso me parece algo desacertado ya que una buena historia no tiene por qué pugnar con esa obsesión en girar la historia hacia lugares indeterminados y casi increíbles.
Ejemplo de sencillez y maestría la encontramos en 'No habrá paz para los malvados', en la que la historia gira hacia un terreno sorprendente pero no rebuscado. En cambio, aquí en esta película no hay sorpresa pero sí excesivo retorcimiento.
No obstante, eso podría ser pasable si, al menos, durante el metraje de casi 100 minutos hubiera habido interpretaciones más brillantes. Un José Coronado al que se le ve algo bajo de tono y un Hugo Silva, eficaz para otro tipo de papeles más adecuados a su rol e imagen, pero no para el que aquí le encomiendan (por cierto, alguien debería decir a este actor que hay que intentar vocalizar mejor). 
No obstante, se trata de una película ciertamente meritoria por una de las razones que esgrimía más arriba, que no es otra que el logrado ambiente creado y la excelente fotografía. También hay que elogiar la banda sonora, a pesar de que ésta no pasa de ser algo más que neutra.   
Pese a todo, es una película que se deja ver bien. Y, además, se trata de cine español hecho con pocos medios y una encomiable determinación y voluntad. Y eso siempre hay que valorarlo.        

07 julio 2013

XV PRUEBA DE FONDO 'RÍO DÍLAR' (7/7/2013)

Competir es divertido. Y puede ser muy divertido si el corredor aficionado acude a las citas para eso, para divertirse. Creedme si os digo que esa es siempre la opción más sensata e inteligente y a la que se llega cuando uno ya tiene decenas de carreras a sus espaldas. 
Divertirse y mantenerse en forma. Sentir que pasan los años y uno puede seguir haciendo circuitos exigentes; sentir que todo va como tiene que ir. Entrenas bien y medio te respetan las lesiones, el médico te ha dicho que estás sano y que no tienes colesterol ni triglicéridos, tu entorno te ve sano y delgado, te compraste la última camiseta técnica que te gustó....Por lo tanto, no exijas más, tan sólo disfruta. Vive el momento para cuando no sea posible hacerlo. 
Compruebo que me estoy poniendo trascendente, pero no es mi intención; y mucho menos un siete de julio en el que el sol acompaña casi hasta que te vas a la cama y se vislumbran unos buenos meses de bajada de inactividad y/o vacaciones. Pero ocurre que esto del correr ha de tener sus reflexiones y sus respuestas, ya que no se trata tan sólo de ponerse unas zapas y dar zancadas por esos caminos de Dios. Ha de haber algo más entre el cielo y la tierra.
Y lo hubo esta mañana en Dílar. O por lo menos a mí me lo pareció ya que sin proponérmelo me sentí congraciado y compenetrado con la ruta, con esos exigentes 16 kilómetros que transcurren por los municipios de Dílar, Otura, Ogíjares y Gójar. En pocas palabras: me sentí bien, muy bien. 
Seguramente había planificado bien mis entrenamientos, había descansado lo suficiente, el olivo-trail estará aportando cosas buenas, lo que fuere, pero el caso es que en pocas ocasiones me he sentido tan bien en una prueba exigente como ésta, a pesar del fuerte calor y a pesar del terreno. 
Así que consciente de ello, decidí disfrutar cada kilómetro y no echar por la borda las buenas sensaciones con cambios de ritmos innecesarios que nunca llegan a buen término. Reconozco que al entrar a meta hubo un momento de reproche: he sido demasiado conservador. He llegado demasiado entero. Debí haber expuesto más. Todo eso me dije. Pero inmediatamente deseché las dudas: había hecho la carrera que la mente me había dictado: cómoda y con buenas sensaciones. 
Porque siempre lo digo: las buenas sensaciones son las que posibilitan afrontar nuevas pruebas y entrenos con mejores perspectivas; con más seguridad y optimismo; con más motivación. 
De hecho, no es la primera vez que me ocurre en esta prueba. Recuerdo nítidamente que hace dos años fue aquí (con salida en Ogíjares) cuando decidí apuntarme a la Subida al Veleta. 

UNA PRUEBA EXIGENTE 

Decía antes que ser trata de una prueba exigente. Una prueba larga y organizada en unas fechas muy críticas. Es más, tampoco sale demasiado temprano (deberían de pensar que hay muchos corredores que necesitan en torno a las dos horas para completar la ruta). Por tanto, no considero que sea una prueba que deba hacer cualquier corredor que no tenga un mínimo de kilómetros en sus piernas. Es algo que vi en los rostros de algunos cuando yo me dirigía al coche y ellos y ellas subían los últimos metros de la última rampa para llegar a la meta. No estaría mal que al igual que ocurre en otras disciplinas aeróbicas (es común en el senderismo y en el montañismo, por ejemplo) se difundiera con antelación el nivel de exigencia de todas y cada una de las pruebas. Nadie debería de exponerse a un sobreesfuerzo que posteriormente pudiera pasarle factura. Opino.

MI CONCURSO 

Prácticamente lo expongo en las primeras líneas, ya que se puede resumir en lo que decía: buenas sensaciones. Percibía los kilómetros sin sensación de haberlos hecho y casi daba lo mismo que fueran hechos en llano, bajando o subiendo. Cuando las buenas sensaciones acompañan, el terreno siempre se distingue menos. Eso lo sabemos todos los corredores. 
Saliendo desde muy atrás, como vengo haciendo últimamente y sin el Forer -por decisión propia- en la muñeca, me complacía en la visualidad del circuito, en el paso por las calles de las localidades, de las urbanizaciones, de las zonas de arboleda y, también, por los pasos en los que el sol golpeaba como un puño de hierro. Nada era ajeno a mis sentidos porque las piernas no pesaban. Como decía antes, la opción podría haber sido el haber imprimido más velocidad a las mismas, ya que éstas claramente la exigían, pero no era una opción importante en mi esquema de carrera. Así que iba adelantando a corredores -algo que es muy habitual si sales desde muy atrás- e iba disfrutando de mi lugar en la prueba. Nada más. Y nada menos. 
Gracias a haber elegido esa opción, puedo hoy escribir esta crónica en sentido positivo; de lo contrario, podría haber sido una crónica tremebunda; o sencillamente, la podía no haber escrito.   
Nota final: siento mis piernas más frescas que nunca. 
                             

05 julio 2013

MÚSICA: DIMMU BORGIR (1993-act)

'Dimmu Borgir' es una banda oscura de origen noruego. Gustan de cultivar el 'black metal' y la rama sinfónica de éste. Por tanto, nos estamos refiriendo a una rama muy definida del metal que no gusta a todo el mundo; y cuando me refiero a todo el mundo, me estoy refiriendo al mundo del metal. No obstante, sus veinte años en escena y sus muchos premios le avalan y demuestra que tienen legión de seguidores y que pueden sacar pecho por haber estado en el Wacken (de la edición de 2007 es el vídeo que inserto) y haber vendido bien alguno de sus discos en el mercado estadounidense. 
Para quien adore el excesivo 'guturalismo' esta banda hará sus delicias pero, a diferencia de otras del género metálico más negro, también apuestan por lo melódico en ocasiones. Es más, ha habido etapas en las que sus seguidores le han reprochado su 'enmoñamiento'. 
Desde casi siempre han tenido problemas entre sus miembros, principalmente, en lo que concierne a autorías de letras, y en más de una ocasión han acabado en los tribunales por estos motivos. Pero aún así y cambiando de miembros en bastantes ocasiones, ahí siguen en la brecha, considerándose como unos de los grandes a nivel mundial del género 'black'. 
Trabajan con una omnipresente voz gutural -en la actualidad la del noruego Stian Tomt Thoresen, de nombre artístico 'Shagrath', que según dice él mismo es el nombre de un orco que aparece en la literatura tolkiana de 'El Señor de los Anillos', aunque no en la película-, dos guitarras de estética muy 'black', un bajo muy presencial y una batería que se caracteriza por una transición muy rápida y coordinada con el bajo. Utilizan teclados.
Es una banda que practica un estilo metálico que no es nada convencional, pero sí señero de ese estilo en sí. Yo, particularmente, no es el que más sigo, aunque valoro su instrumentalidad.   

04 julio 2013

REINVENTÁNDOME

Era jueves y tocaba correr. Hay prueba el domingo y es de las más exigentes. No se podía demorar el entreno.
Ayer fueron 13 kilómetros con malísimas  sensaciones. Aún así, a medida que pasaban los kilómetros, y gracias a que  el terreno era llano, el malestar inicial se fue atenuando. Debe ser el oficio. O la costumbre. Posteriormente llegué a la conclusión que el fuerte calor había hecho mella. Salí antes de las ocho de la tarde y  esa hora el termómetro rebasaba con creces los treinta grados.
De ahí que a la tarde siguiente no me encontrara completamente recuperado. Saldría más tarde, pero lo que menos me apetecía era hacer una ruta urbana. Demasiada gente paseando por las aceras, demasiados terrazas de bares, demasiados obstáculos. Entonces fue cuando pensé en la posibilidad de adentrarme por senderos de olivos por la zona de Caparacena. Hacer olivo-trail. Me brillaron los ojos.
Por tanto, en veinte minutos me encontraba ya calzándome las zapas, dispuesto a adentrarme por esa rutas sinuosas y quebradas. Eran casi las 9 de la noche y el calor fuerte ya había atenuado bastante. 
Lo que resultó fue una ruta fantástica de 11 kilómetros anárquicos. Saliendo de caminos y adentrándome en senderos desdibujados entre olivos. 
Incluso a eso de las 9 y media me extravié y no sabía bien donde estaba. Vi unas tapias y resultó ser el minúsculo cementerio de Caparacena, del que había oído hablar pero que jamás había visto. Ahí deben estar enterrados algunos antepasados, pensé. Doblé a la izquierda y me adentré por una torrentera seca muy empedrada. Seguramente que en periodo de tormentas y lluvias irá hasta arriba de agua, consideré. 

Perderse por aquí no es nada difícil: todo parece igual
Volví a subir a una loma alta entre olivos y a lo lejos presencie lo que me pareció era el camino por el que normalmente transito. Oscurecía y no podía hacer florituras, porque a medida que se hiciera más de noche más difícil iba a tener encontrar el sendero principal que me condujera a la pequeña carretera que conduce a Caparacena. Todo parecía igual.  Crucé campo través la loma alta de olivos y, efectivamente, me topé con el sendero principal y conocido. Ya oscurecía. Confieso que experimenté cierta alegría, pero al mismo también cierta satisfacción por haber elegido libremente correr por aquel lugar en vez de hacer una anodina ruta urbana. 
Y es que en esto del correr hay que estar permanentemente reinventándose.          

02 julio 2013

CINE: EL BOSQUE (Esp, 2012)

'El Bosque' (no confundir con 'El Bosque' de Shyamalan, de 2004) es una película española -catalana- de bajo presupuesto, pero que reboza dignidad. Con guión del escritor de literatura fantástica Albert Sánchez Piñol -basada a su vez el guión en un relato suyo de 2001-, un escritor de notable éxito gracias al impacto de su literatura fantástica y mágico-realista ('Pandora en el Congo', 'La piel fría'...), no se trata de una película más sobre nuestra fratricida Guerra, a pesar de que sobre el papel lo parezca. Sin embargo, eso me plantea dudas. Para llegar a alguna conclusión hay que ver la película hasta el final. Hasta ahí puedo contar. 
De lo contrario destrozaría película, ya que se trata de una de esas que te destroza el amigo, el familiar o el conocido, sencillamente, destripando el final tan sólo. 
Sin duda, no todo es tan sencillo en la película, ni todo es tan fantástico si lo pensamos bien. Abunda la metáfora y el mensaje y, tal vez, exista más preocupación de lo que ha entendido la crítica por los grandes asuntos que existieron en la Guerra Civil española. 
En todo caso, como decía al principio, se trata de una película digna y bien interpretada. Con factura catalana, aunque se desarrolle en un imaginario pueblo de Teruel, lógicamente, muy introducido en comarcas catalanas. 
Proverbial la interpretación del actor catalán Pere Ponce. Aconsejo verla ya que el entretenimiento está asegurado y el final nos sorprenderá.   

30 junio 2013

¿MI PRIMERA RUTA TRAIL RUNNING SERIA?

La pregunta del título es la que me hacia el pasado sábado cuando a eso de las 12,30 de esa calurosa mañana de junio acababa de entrenar por una anárquica ruta de 18 kilómetros, entre olivos. La había hecho en MTB y me pareció ideal para este tipo de bicicleta. Un camino maltrecho, roto por la fuerza de las torrenteras, enquistado y pedregoso que, además, cuenta con las típicas subidas y bajadas del terreno de secano en el que suele crecer el olivo en esta zona del sur de Andalucía. 

Cuando hice esa ruta en MBT, me dije que algún día la haría corriendo y esa intención me causó respeto desde el principio; una cosa era hacerla en bicicleta y otra hacerla corriendo.
Pero llegaron las Cascadia y la determinación de experimentar el trail running y ya no había escusa alguna para no hacer la ruta. Así, que ayer fue el día en el que se materializó aquel anhelo de hace más o menos un año. Además, se daban las condiciones adecuadas: terreno totalmente seco y algo de calor. 
Correr con demasiada calor no es algo aconsejable, pero sí considero que lo es correr con algo de calor en verano, más que nada porque conviene ir aclimatando el cuerpo y la mente a estas nuevas condiciones atmosféricas, principalmente si de lo que se trata es de inmiscuirse a lo largo del periodo tórrido por este tipo de terrenos. La idea es también ir preparando la prueba que tengo en mente. Así que preparé mi correa de hidratación y no lo dudé.
Esta primera incursión por este tipo de terreno no se puede considerar lo que se entiende como un trail técnico, ya que éste se materializa por lugares en los que hay tramos en los que no es posible correr, pero ya digo, se trata de un terreno introductorio que encaja mucho en lo que quiero hacer, ya que descarto -por ahora- correr algo que sea más técnico. No obstante, sí profundizaré por otros lugares con más puntos técnicos ya que esto es tan sólo -ya digo- la introducción. 
Pero me satisfizo. Y mucho. Se trata de una fenomenal opción para no apalancarse en el running-running. Buscar otras opciones que posibiliten mantener viva la llama de la ilusión. 
Reconozco que me gusta mucho correr por caminos cuidados y por asfalto. Será algo que seguiré cultivando, pero ahora toca abrirse a nuevas perspectivas, a nuevas experiencias. Como lo fue correr el Veleta o la Media Maratón de Montaña de La Ragua o las dos maratones que he corrido. Hemos de renovarnos. 
Y al renovarnos conseguimos sentir nuevas sensaciones y descubrir material técnico que no conocíamos de propia mano. 

Esas nuevas sensaciones son magníficas. Verse corriendo por caminos pedregoso rodeados de naturaleza en estado puro, sin que la mano del hombre haya hecho gran cosa es algo nuevo y único. Es como volver a nuestra naturaleza más ancestral. Sentirse fusionado con el entorno del que partimos como seres vivos. Por otra parte, experimentar nuevo material técnico es también emocionante. Por ejemplo, las nuevas zapas con las que me he hecho -ya hice hace unos días su presentación-, las Brooks Cascadia 7, que gozan de una perfección técnica para este tipo de terrenos que es encomiable. Una zapatilla nacida para el trail, que se agarra a la perfección al terreno tanto subiendo como bajando. Sin duda, una experiencia nueva. Las pocas veces que había pisado, aunque fuera de forma muy casual este tipo de terreno, lo había hecho con las zapas de running más convencionales y la diferencia es cósmica. Particularmente emocionante es comprobar cómo la suela de la zapatilla de transmite a la perfección lo agreste del terreno sin que eso lo sufras en la planta del pie. Espectacular es también comprobar cómo las bajadas las puedes hacer con mayor confianza -y por tanto con más velocidad- dada la garra que tiene la suela. 
Sigo corriendo, no hay duda, pero ahora seguiré corriendo con la certeza de que introduzco una nueva opción, igual o más placentera que la anterior. Ahora seré,  probablemente, un corredor más ecléctico.      

29 junio 2013

DREAM THEATER VERSUS METALLICA

Cuando uno rebusca por YouTube -qué gran invento, Dios!!-, te puedes encontrar pequeñas joyas que no sabías que existieran. La última que encontré es esta versión que hacen los Dream Theater de 'Master Of Puppets', uno de los temas mas señeros de la banda californiana Metallica. Escuchar los riff 'metallicos' de este gran tema en manos de músicos tan virtuosos es algo que impresiona. También es sorprendente la voz de LaBrie -mucho más melódica- emulando al sinpar James Hetfield. Y lo más milagroso es que a pesar de que se atrevan con uno de los  cortes thrash más mediáticos no dejan de imprimir su sello 'Theater':

28 junio 2013

¿QUIÉN PILOTA EL CAMBIO? (IDEAL, 27/6/2013)

España ha vuelto a derrotar a la temible Italia, si bien en esta ocasión ha costado más. Eso está bien. Ofrece al ciudadano, si no esperanza, al menos, un rato de entretenimiento, pero sin ánimo de ser aguafiestas -para eso está ya la clase política- no debemos olvidar ni por un momento, que el fútbol no es más que una burbuja protegida y que no siempre será así. Los privilegios acabarán si no es que están acabando ya. Lo veremos muy pronto. De hecho, la investigación y publicidad del 'caso Messi' no es más que el aviso que el gobierno quiere dar. Es como si dijera: 'si podemos meter en cintura a Messi, podemos meter a cualquiera'. ¿ Pero quién mete en cintura a la rapiña política? ¿Quién pilota el cambio? Sobre ese asunto escribo más de seiscientas palabras en el periódico Ideal del día 27. Si no os fue posible leerlo en papel, aquí podéis hacerlo. 

¿QUIÉN PILOTA EL CAMBIO?

 Lo que parecía un incipiente rumor, una voz común ahogada, cada día toma más cuerpo. Se escucha en la calles y en los bares y el rumor va a más. Ya no se trata de una mera conjetura trasnochada, ni una silente percepción apreciada en encuestas varias: no interesa la clase política y sus cuitas; causa rechazo, indignación, impotencia. El desinterés es inversamente proporcional a la frustración.
               Lo que hace algunos lustros podría considerarse la opinión de cuatro antisistema, ahora se está convirtiendo en un clamor popular. Y cuando el pueblo manifiesta como una sola garganta su enconada cólera se suelen trastocar las estructuras. Observemos el ejemplo de Turquía, donde una inicial oposición a la remodelación del parque Gezi de Estambul está sirviendo para exteriorizar el rechazo popular hacia una forma de gobernar determinada. Aquí, en este país, no sólo se han eliminado parques, se han eliminado ecosistemas enteros, y no se trata tan sólo de una mera metáfora. Pero en España el personal parece ser más pacífico. O más conformista. O más desencantado. O todo junto.
               Fuere lo que fuere, lo que es evidente es que existe un galopante divorcio entre la clase política y el pueblo. Un distanciamiento que ya no se soluciona con el sempiterno diálogo me temo, sino con el cambio de rumbo. Y ahí está el problema. O la pregunta: ¿Quién pilota el cambio? ¿La misma clase política? ¿El pueblo con su voto en las urnas, que cada vez se torna más insignificante? ¿La Unión Europea que se está convirtiendo más en un problema que en una solución? No parece haber muchas salidas.
               O no parece haberlas, o bien, no pensaron en ellas quienes debieron hacerlo. No cayeron en la cuenta que la corrupción, pese a lo que parezca, no tiene tanto que ver con lo material ni con lo político como con la ética y la moral; en última, instancia, con todo lo relacionado con el espíritu humano. Y éste, por poco que pese, es realmente el que cuenta. En nada de eso pensaron y es probable que ahora en este país sea necesaria una transición de veras, una refundación, una catarsis. Arreglar lo que no se abordó en su día.  Aunque también parte de culpa radica en los súbditos, en el pueblo. Culpables por no mirar de frente al problema. Por ser condescendientes, manejables, crédulos. Por no dudar de todo lo que nos contaban a pie de coche oficial. Por no ser más contundentes cuando comenzó el festín. Por pensar ingenuamente que todos podríamos participar de él.
               Porque aunque parezca mentira, la clase política sigue pensando de forma interesada que todo se limpia con unas nuevas elecciones, con otro partido en el poder o con otros políticos menos salpicados, con un borrón y cuenta nueva, con una ley de punto y final, pero se equivocan: nada que concierne al espíritu se limpia con cosas triviales. Es necesaria una diálisis más contundente que purifique al sistema. O que lo cambie.
               Y llegado a este punto es cuando habría que preguntarse si todo lo que está ocurriendo, todo lo que se está pudriendo a pasos agigantados, todo lo que está salpicando a diario no sea más que el comienzo de la catarsis que está por venir. Un dejar hacer para que todo se pudra. Como negarse a retirar la manzana podrida para que se pueda pudrir toda la caja. No olvidemos que los grandes cambios siempre han venido de la mano de acciones a priori insignificantes. Lo que no está claro es si los ciudadanos estamos capacitados para asimilar todo lo que está aún por saberse, todas esas carpetas que algunos se niegan a abrir porque el hundimiento del sistema estaría asegurado, todos esos apuntes en paraísos fiscales que pugnan por salir pero que no llegan a hacerlo, todos esos sumarios sellados, todas esas bocas alimentadas que faltándoles el sustento acabarán por abrirse. 

27 junio 2013

HABLAMOS DE CORRER, HABLAMOS DE TRAIL






Lo anuncié subrepticiamente. 'Habrá sorpresas en cuanto a material técnico' o algo así escribí en una entrada, en la que ensalzaba el placer de correr entre pinos y olivos. '¿Seré carne de trail?' Creo recordar que me pregunté también en una ocasión hace muy poco. Pues sí, ya se ha hecho realidad lo que intuía; ya he dado el primer paso -nunca mejor dicho- para hacer mi primera prueba de competición de trail running. Ya me ha llegado desde UK lo que necesitaba, lo más básico: unas zapas técnicas que pudieran permitirme introducirme en esta modalidad de carrera. Ya están aquí las míticas Brooks Cascadia -estas de las fotos son la versión 7. Acaba de salir la 8, que varían poco o casi nada-. Han venidos por pares. El otro para Juan Carlos Fernández, compañero de trabajo, corredor, dado también al monte y con el comparto la pasión por el correr y las películas frikis norteamericanas (y espero que también la música que yo escucho, en la que le estoy introduciendo poco a poco -Anathema es un buen comienzo-).
Unas zapas que se ajustan a lo que buscaba, que no es otra cosa que hacer trail running no demasiado técnico y que al mismo tiempo me sirvan para 'asfaltear' si fuera necesario. Además, estaba echando de menos algo así, porque le he tomado apego a los caminos y veredas de olivos y las zapas que tengo, aunque se defendían, no se encontraban cómodas en estos terrenos. La que más la Triumph; la que menos la Supernova, con la que eres candidato a acabar con un sonado esguince. 
La primera prueba competitiva, si las cosas no cambian y todo va bien será en mitad de agosto, en los días más típicos en los que la mayoría de la gente se tuesta en la playa y hace cola en el chiringuito para que le sirvan la paella encargada cuatro horas antes, yo estaré corriendo caminos y veredas por un lugar de de interior. Pero como no me gusta adelantar acontecimientos porque podrían no cumplirse, cuando llegue el momento contaré dónde correré.
Por tanto, ahí mezcladas con el follaje de las plantas, las Cascadia se encuentran a la espera de su debú, que si todo sale como preveo será mañana por una ruta algo pedregosa entre olivos, pero también tocando asfalto, a ver cómo se portan.    

25 junio 2013

HACIENDA YA NO SOMOS TODOS

Hace unos días, recibimos una decepción colectiva. Todos pensábamos que había un órgano del estado que jamás se equivoca, pero resulta que ahora sí lo hace. 
Preocupado, me he puesto a repasar todas las declaraciones de la renta que tengo guardadas y compruebo que jamás Hacienda ha tenido una fisura. Es más, en una ocasión me pagaron un par de cursos que impartí a través de una factura -unas cantidades humildes- y Hacienda replicó inmediatamente que qué era eso. Cuando se lo expliqué me dejaron dormir porque comprobaron que de esa forma yo pagaba más impuestos que si me hubieran deducido el IRPF. Y como salí perdiendo, me dejaron en paz.
Pero no creáis, esa acción de Hacienda me ratificó aún más en la idea de que nada escapa a ese gran ojo fiscal y que por fin algo funciona correctamente en este corrupto país. Sentí cierto orgullo, pero eran otros tiempos, en los que uno era aún algo crédulo.
Pero ahora nos llega la noticia que no, que no era un órgano tan infalible como pensábamos, que se equivoca. Qué decepción.
Y, realmente, no me lo explico, porque ¿cómo es posible que no conozca ningún caso de haberse equivocado jamás en su contra cuando maneja dígitos de DNI de ocho cifras y sí lo hace cuando maneja dígitos de DNI de dos cifras? Otro tortuoso misterio que habrá que desvelar.
Por fin, tantos días de duda han llegado a su fin. Lo ha explicado el ministro de la cosa: no se ha equivocado Hacienda, han sido los registradores y notarios. Esos colectivos tan orgullosos y celosos de su trabajo. Tanto que sólo por tocar el pomo de sus despachos ya estaban abriendo la cartera. Pero eso sí, te explicaban el por qué y cómo de sus elevada factura: son los que elevan a público, los que exteriorizan tus posesiones y tus bienes, y eso hay que pagarlo. 
No voy a defender a ninguno de esos dos colectivos. Entre otras cosas porque no tengo amigos en ninguno y porque han sacado toda la tajada que han podido del sistema corrupto del ladrillo que ha presidido este país, pero pregunto ¿sacarán ese orgullo y esa suficiencia y hasta vanidad, en ocasiones, que atesoraban tras sus lujosas mesas de despacho, ahora que el ministro los han situado a los pies de los caballos? Habrá que esperar la respuesta en los próximos días (oye, Rajoy, que eres registrador de antigua profesión. Dale un toque  a tu  ministro, tío).
Realmente, no terminas de sorprendente si piensas en todo todo lo que aún está por ver y saber en este destrozado país. Sorprendidos ante la estulticia y la alta factura -casi infinita- que hay que seguir pagando para proteger a la casta política y esta monarquía caduca que cada vez es más un problema (siempre pensé que nunca fue una solución). Que incluso lo más sagrado que había, que no es otra cosa que la institución que atesora la redistribución de la riqueza también se hinqué de rodillas ante la tropa -¡vaya tropa!- borbónica. La misma institución que con valentía ha denunciado que el futbolista mejor pagado del mundo, Leo Messi, debe al fisco más de 4 millones de euros en impuestos; la misma que ha porfiado de manera asombrosa para que el astro argentino acabe pagando entre impuestos y multas más de diez millones de euros (es probable que pague catorce más en los próximos días o meses). Y  todo ese prestigio, tirado a la borda porque ahora resulta que alguien decente dentro de Hacienda ha denunciado con supuesta razón que la infanta ha vendido un buen número de fincas y que no ha cumplido con el fisco. 
Habrá que preguntarse -y eso da miedo hacerlo- que se estará ocultando para que se sacrifiquen, incluso, instituciones tan sagradas como es la misma Hacienda. Porque yo no me creo que Hacienda se haya equivocado.     

UN NUEVO PROYECTO ARRIESGADO

  Tras acabar mis dos últimas novelas, Donde los hombres íntegros y Mi lugar en estos mundos , procesos ambos que me han llevado años, si en...