Caen las hojas. Caen los medios maratones. El otoño, que cubre casi la totalidad de los tres últimos meses del año es propicio para correr la atractiva distancia de 21 kilómetros y sus 97 metros. Por algo será.
Podría ser porque no se suele sufrir ni calor ni frío y porque al recogimiento, que ya invitan las calles de las ciudades, les sienta bien el colorido dominical de cientos -y hasta miles- de corredores pateando sus calles en claro contraste con los paseantes alegres, relajados y confiados -con prensa en la mano- de las dulces mañanas de domingo.
O porque es un periodo en el que los ayuntamientos espacian sus actividades lúdicas, culturales y deportivas y les viene muy bien la planificación de este evento, por el que pugnan ya casi todas las ciudades de nuestro país.
Por supuesto que no todos los medios maratones son en otoño, pero sí lo son muchos. De hecho, en la zona de influencia desde la que escribo hay varios y muy destacados -seguramente olvido o desconozco bastantes, por lo que os ruego que los reflejéis si conocéis de su existencia-: está el siempre atractivo Medio Maratón de Motril, la semana próxima y que suele cambiar su fecha en función de varios elementos a tener en cuenta; o al menos así ha sido en los últimos años (campeonato de España, de Andalucía...); está el cada vez más emergente Medio Maratón de Jaén, que se correrá el próximo día 28 de octubre y que siempre es duro y se ha tenido que correr algún año que otro en unas condiciones atmosféricas adversas; está nuestra cita más importante en la capital de granadina: el Medio Maratón, que se correrá la mañana del 4 de noviembre, pudiendo perfectamente correr bajo la lluvia y hasta del frío; está el nuevo Medio Maratón -larga vida- de Antequera, el 11 del mismo mes y el joven Medio Maratón de Rincón de la Victoria, a celebrar el 18 del mismo mes; está el mítico Medio Maratón de Córdoba, a celebrar el día 25 de noviembre, que incluye actividades de gran evento deportivo: comida de la pasta y feria del corredor. De ahí que se convierta, probablemente, en el mejor de Andalucía.
Cartel correspondiente a la edición de 2010 |
Pero hay muchos más no lejos de estos lugares. Por tanto, una agenda para no respirar, porque estos seis, que no coinciden, los puede hacer un mismo corredor aguerrido, a pesar de que apenas exista descanso para la recuperación. Todo dependerá del ritmo competitivo que se quiera imprimir en cada uno de ellos. Y de camino tenemos la oportunidad de conocer todas estas bellas ciudades andaluzas, tan distintas entre ellas y, tal vez por ello, especialmente interesantes. Por tanto, id preparando el bolso y cargando el depósito de combustible del coche, que están a tiro de piedra unos de otros.
¿Os animáis? ¿Nos animamos?