09 octubre 2011

OPTIMISTA DE CARA A MOTRIL

Los últimos rodajes me hacen ser optimista de cara a marcar los noventa y cinco minutos (por ahora descarto los noventa) en la próxima Media de Motril, pero dependerá mucho -como bien dice Alfredo- de la humedad con que nos encontremos en la capital de la costa granadina.
Particularmente, en la tarde del domingo he rodado con facilidad, fuerza y velocidad en los catorce kilómetros de rodaje planificados. Además, a nivel aeróbico me he encontrado fenomenal y no me han pesado las piernas en absoluto, a pesar de haber rodado la tarde anterior otros trece kilómetros por terreno algo más duro.
Los días anteriores, desde la prueba de Almuñecar, me he dedicado a rodar sin más en distancias medias y zonas no cargadas de demasiadas cuestas para ir refrescando las piernas, tan pesadas tras la prueba del Veleta y sus previos entrenamientos en alto. Porque qué duda cabe que un entrenamiento que es válido para una determinada prueba no lo es para otra y resulta que, en mi caso, he acusado mucho esos entrenos en altura, en los que las piernas se endurecen como el acero pero también se ralentizan. Es el momento de sacar provecho de la fuerza ganada en agosto en cuanto se aligeren algo las piernas.
Normalmente, y por la experiencia de años anteriores, en estos últimos meses del año entreno bien sin que me afecte que llegue el frío y la lluvia; de hecho esos buenos entrenos en los últimos meses del año posibilitaron que este pasado enero bajara de los noventa y cinco minutos en la Media de Almería. Busco que se repitan esas circunstancias.
Sigo sin hacer series porque no encuentro el momento ni las ganas para hacerlas (definitivamente, no me gustan) pero sí he incrementado los cambios de ritmos y los ritmos controlados a velocidad más alta, que a todo eso da lugar en un rodaje medio o largo.
Sin embargo, me inquieta no poder llegar al domingo con las piernas tan descansadas como las siento en este momento, por lo que seré prudente en cuanto a kilometraje en esta semana, pero sí incrementaré la elongación, abdominales y flexibilidad. También he llevado a cabo algunos cambios en el aspecto nutritivo, ahora que no hay tantos viajes en el horizonte. Intentaré sacar provecho a este aspecto hasta, al menos, los albores de la navidad, época en la que todos nos solemos desmadrar un poco en cuanto a comida y bebida, aunque, en mi caso, existe bastante control ya que, por lo general, reniego de comidas de empresas y ágapes similares.

07 octubre 2011

STEVE JOBS


Desde el fallecimiento de Steve Jobs, el cofundador de Apple he leído y escuchado a lo largo del día en todos los medios de comunicación todo un aluvión de parabienes acerca de una figura singular que, efectivamente, ha revolucionado la forma de comunicarnos y acceder a la información. Pero en realidad poco sabemos sobre la persona aunque sí sobre el personaje.
Aunque enclavados en el mundo occidental mucho dista nuestra forma de ver las cosas con la de los ciudadanos de norteamérica y si existe un elemento diferenciador ese es el relacionado con todo lo que tenga que ver con la informática e Internet. De hecho, EEUU ha sido y sigue siendo la cuna de estos dos grandes inventos propios del siglo XX, que se siguen desarrollando, y de qué manera, en el siglo XXI.
Microsoft, Apple, Google, Facebook, Amazon...todo esos fenómenos tienen su origen en la principal potencia mundial y las otras grandes potencias, léase Japón, Unión Europea, los tigres asiáticos e, incluso, China poco han aportado a este vasto mundo de la informática e Internet.
Por tanto, en nuestro contexto, es bastante presuntuoso comprender la labor que ha ejercido Steve Jobs, aunque es normal que en el día de su fallecimiento se utilicen tópicos tendentes a incrementar el mito. Un mito que ya lo era en vida.
¿Pero cuál es la razón de que el cofundador de Apple y la propia marca de la manzana mordisqueada posean esa mística, superior a cualquier otra de sus competidores?
Seguramente muchas serían las razones y los expertos ya llevan años rebanándose lo sesos para dar una respuesta. Pero en mi inexperta opinión, nadie hoy día puede estar a la altura de Apple ni a nivel de diseño ni a nivel de excelencia técnica. Y si la genialidad es también extrapolable a otros terrenos que no sean meramente pictóricos, escultóricos, literarios o cinematográficos, si la genialidad informática y comunicativa tiene un nombre es el del que hoy ha fallecido, muy por encima de sus competidores.
Bill Gates tuvo el mérito y la fortuna de crear un sistema operativo que con cierta trampa logró implantar -de forma obligatoria casi siempre- en todos los ordenadores personales del mundo, con independencia de la marca de los mismos. Sin embargo, aparte de esa virtud esta compañía no ha creado ningún dispositivo más de mérito. De hecho, ni tan siquiera ha creado ordenadores propios. Sin embargo, Jobs no sólo ha creado un sistema operativo propio -de nombre Leopard- sino que ha creado ordenadores de mesa -Mac o Imac- y portátiles -MacBook- hechos a su medida. que además poseen ventajas que no poseen los PC's ni los portátiles ordinarios. Pero ha llegado mucho más lejos ya que ha creado dispositivos -Ipod, Iphone e Ipad, los tres de increíble manejo táctil desde la pantalla- de ensueño, capaces de compartir idénticas aplicaciones y con muchísima más perfección y seguridad que el sistema operativo Windows y con un diseño y manejabilidad que ha extasiado a todo el planeta. Quizá ahí esté la diferencia. Quien haya manejado alguno de estos dispositivos sabe de lo que estoy hablando.
Sin duda Steve Jobs no ha sido ni el principal programador ni principal diseñador de todos esos dispositivos (estamos hablando de una corporación con un batallón de ingenieros informáticos, diseñadores y un largo etcétera) pero ha sido quién ha tenido la idea genial de introducir todos estos dispositivos geniales en nuestras vidas. Ha comprendido las necesidades de los ciudadanos actuales y por eso se convierte en visionario.Y, además, ha sabido venderlos. Esos son sus enormes méritos y cualidades que aunque hoy hayan llegado a su fin, queda el legado que continuará -esperemos- Tim Cook, que es el sucesor que eligió en su día el propio Steve Jobs.

03 octubre 2011

XXIII PRUEBA DE FONDO "COSTA TROPICAL", DE ALMUÑECAR (2/10/2011)


Lo importante de haber corrido este pasado domingo en la prueba de fondo de Almuñecar es tener la sensación de haberme reencontrado con el yo del año de 2010 (no, no estoy refiriéndome a la sin par Regreso al Futuro); y es que, precisamente, en Almuñecar comencé a dar signos de mayor ritmo aeróbico en distancias superiores a 10 kilómetros. De hecho, en el crono medio de este año he arañado unos segundos con respecto al del año pasado, toda vez, que en esta ocasión sí ha habido una distancia exacta de 14 kilómetros, pero no el año anterior que faltaron más de 500 metros.

Me he reencontrado, pero de una manera no demasiado memorable, ya que se han ausentado las buenas sensaciones y ha sobrado el sufrimiento, principalmente en los últimos kilómetros, precisamente los de más calor.

La decisión de salir rápido en los primeros kilómetros ha podido resultar algo insensata porque me he ido desinflando a partir del kilómetro 10 de una manera muy apreciable. Se podría decir que en estos últimos kilómetros he vivido de las rentas de los anteriores.

En esta prueba de Almuñecar hay que dosificar, en primer lugar porque no es una prueba corta y, en segundo, porque no se puede contar con la garantía de que octubre sea un mes fresco y que el calor y la humedad no sea tan agobiantes. De hecho, este octubre no lo ha sido y la humedad ha sido muy palpable, principalmente, en los largos tramos junto al mar, aspecto éste que hace que la dosificación sea muy difícil. Bastó con comprobar el grado de empapamiento de la camiseta e, incluso, el pantalón.

Si el circuito estuviera diseñado al revés, es decir, que los primeros kilómetros transcurrieran junto al mar y los últimos por lugares más frescos en la Vega tropical, sería mucho más factible hacer más rápidos estos primeros kilómetros, sabedores de que los últimos serán menos calurosos y la humedad menor. Pero es justo al contrario, circunstancia ésta que hace que la mayoría de los corredores vayan de más a menos, desde los más rápidos a los más lentos. El sufrimiento por la zona de Velilla se palpaba en los rostros.

Ese ha sido mi caso, aunque no solamente por el diseño de la ruta. La realidad es que en los primeros diez -o tal vez antes- el ritmo que imprimí fue excesivo para mi forma actual y los últimos entrenamientos no avalan el hecho de rodar a ritmos inferiores -en algunos kilómetros- a 4'15'', e incluso a 4'07'' en uno de ellos, según registra el Forer. Lógicamente, en una carrera de 14 kilómetros esto se paga, porque rodar a ese ritmo en competición cuando no se hacen entrenamientos específicos de calidad, no estando los rodajes más rápidos por debajo de 4’40’’ el mil, es bastante arriesgado. Y lo pagué a precio de oro. De hecho, en la corta cuesta que da acceso al entorno del estadio "Francisco Bonet" barruntaba la posibilidad de detenerme y subir andando (me decía a mí mismo con cierta ironía que Almuñecar no era el Veleta).

Pero no lo hice y ahora me alegro. Sin embargo, no tuve fuerzas para forzar en la pista en esos últimos trescientos metros de la misma. Pero eso ya me daba igual porque sólo fuerzo cuando voy con buenas sensaciones, de lo contrario me dejo llevar.

Curiosamente a mucha gente se le va la olla en la pista. Es más, no comprendo cómo corredores que van al límite de sus posibilidades casi desmayan por llegar en sprint al arco de llegada. Supongo que será por la foto. Llegar muy rápido a meta, en mi opinión, no debería ser más que el premio que uno se otorga cuando se llega con buenas sensaciones y fuerza, pero no en el caso de llegar al límite. De hecho, a lo largo de las muchas competiciones realizadas he visto a gente casi caer de rodillas al llegar por cometer esa locura, ¿merece la pena ese esfuerzo? Probablemente para ellos, sí.

No hay duda: somos lo que estrenamos. Ahora bien, cada corredor es dueño de su plan de entrenamiento y en función de que se tenga un plan más o menos ambicioso los resultados en competición serán congruentes con el mismo, porque al margen de poseer una buena genética para correr, ser más joven o menos joven o tener una mejor o peor adecuación física, no existe otro secreto que el entrenamiento.

De hecho, nos ocurre a todos que cuando rodamos a un buen ritmo en alguna competición, rebosamos de optimismo y nos planteamos acrecentar el entrenamiento –sobre todo el de calidad- pero ocurre que las circunstancias del día a día a cada cual nos pone en nuestro sitio y es difícil buscar el tiempo necesario y las ganas para llevar a cabo una planificación teutona de nuestros entrenos que incluya: pista, fisioterapia, tiradas largas fijas, nutrición estricta, descanso suficiente... es cierto que mucha gente hace todo esto, y ahí están sus resultados; otros lo intentan y lo llevan a cabo durante algunas semanas, pero acaban abandonando.

Y es que finalmente siempre hay que hacerse las siguientes preguntas: ¿Qué marca quiero conseguir? ¿Qué sacrificios estoy dispuesto a hacer para conseguir la marca que quiero? En definitiva, ¿Qué supone para nosotros, corredores sociales, correr? En mi caso, las respuestas cada vez están más claras. En realidad, se concretan a una sola: quiero seguir corriendo, sin aditivos.

Pero, en fín, para no irme por senderos existencialistas, en lo personal, lejos de conseguir otros objetivos imposibles o muy onerosos, he de afirmar que me encuentro satisfecho con lo conseguido, satisfecho por constatar que pasan los años y uno sigue siendo capaz de correr un puñado de kilómetros sin detenerse, satisfecho por poder justificar aunque sea un poco esa vestimenta atlética que llena de colorido las calles y plazas de pueblos y ciudades, en definitiva, satisfecho por seguir estando ahí.


01 octubre 2011

EL CIRCO INSTITUCIONAL

El pasado jueves una noticia en varios medios de comunicación anunciaba que se iba a celebrar en el Congreso de los Diputados un almuerzo -en este país todo, lo bueno y lo malo, se celebra con una comida- para despedir la legislatura a propuesta del Presidente del Congreso, José Bono, que como todos sabemos tiene fama de ir pagando las facturas de su bolsillo.
La noticia, evidentemente, no era bien recibida a tenor de los muchos comentarios sobre la misma, todo ellos en la línea de criticar el escandaloso dispendio de nuestra clase política, mucho más escandaloso en los tiempos actuales de crisis. La gente a través de sus comentarios -anónimos unos, identificados otros- despotricaba sobre la iniciativa. Sin embargo, yo fui más lejos y decidí enviar un correo electrónico al mismo Congreso, iniciativa que secundaron varios compañeros de trabajo cuando les envíe la idea por la tarde.
Mi correo electrónico decía textualmente lo siguiente:

He leído en prensa que ustedes -me imagino que los 350 componentes del Congreso- más el Rey y, probablemente, algún asesor que otro, celebrarán un almuerzo para conmemorar el fin de la legislatura.
Me parece muy bien que celebren lo que quieran, a pesar de que si hubiera un poco de sensatez poco habría que celebrar. No obstante, espero que esta no se la carguen a los presupuestas del Estado sino que la asuman ustedes, al menos, con el importe de sus cuantiosas dietas. Espero una respuesta, por supuesto. Les ruego que les dirijan este correo al Presidente del Congreso y a los portavoces de cada uno de los grupos con representación en la Cámara. Atentamente,

JOSE ANTONIO FLORES VERA

Al día siguiente, recibí una respuesta de la Dirección de Comunicación del Congreso en la que no respondían de manera directa a mi inquietud. Los términos en los que me respondieron fueron textualmente éstos:

Estimado Sr.,
En contestación a su mail le informo que no ha habido un almuerzo de conmemoración de fin de legislatura con todos los componentes de la Cámara, sino que el presidente del Congreso ha ofrecido el miércoles, 28 de septiembre, un almuerzo a los representantes de las altas instituciones del Estado, al que ha acudido Su Majestad el Rey Don Juan Carlos.
Al almuerzo asistieron el presidente del Senado, Javier Rojo; el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; el presidente del Tribunal Constitucional, Pascual Sala; el presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo, Carlos Dívar y el fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido.

Enlace a la fotonoticia:

Lógicamente, el gabinete de comunicación del Congreso -mucho más político que periodístico- se agarró al dato de que no serían los 350 Diputados sino que se limitaron a anumerar con exactitud las personalidades que irían a ese almuerzo como queriendo decir que eran los verdaderos padres de la patria y como tal tenían derecho a cualquier cosa, gratis total, además. Lógicamente, no me pareció idónea la respuesta; de hecho, no respondieron al elemento central por el que preguntaba. Así que decidí enviarles otro correo electrónico en estos textuales términos:

En primer lugar, gracias por su atento correo electrónico, pero, como ciudadano que paga puntualmente sus impuestos, sigo sin saber la respuesta.
Lo importante no es si fueron 350 o 7, sino conocer si ese almuerzo se carga a los presupuesto del Estado y el importe del mismo. Curiosamente, se trata de, probablemente, las siete personalidades mejor pagadas del país y sería sensato que predicaran con el ejemplo y asumieran la celebración con su propio sueldo o dietas, tal y como hacemos los españoles que, además, como es el caso de quien suscribe- hemos sufrido un recorte en el sueldo en calidad de empleados públicos, en el mejor de los casos, o se está en el paro como les ocurre a millones de personas.
En pos de la regeneración y transparencia, le ruego envíe copia a cada comensal, representantes de las distintas Instituciones aludidas.
Atentamente,

JOSE ANTONIO FLORES VERA


Ese último correo electrónico aún no ha obtenido respuesta, algo lógico ya que fue enviado el viernes por la tarde. Probablemente no habrá respuesta por lo que la pregunta aún queda en el aire.
Esta pregunta no persigue otra cosa que dejar al sistema con el culo al aire y, al menos, que comprendan que la ciudadanía no es tan tonta ni manipulable como ellos consideran.
Esta es la clase política que tenemos. Este es el sistema que tenemos: un artificio centrado en intereses personales que buscan el beneficio individual enmascarado en una más que hipotética democracia.
Ni más ni menos.

28 septiembre 2011

EL OCASO DE LOS YERNÍSIMOS



Aunque en este caso estemos ante el yernísimo por esencia, porque se trata del yerno del mismo monarca, heredero borbónico de los reinos de España.
Hace ha que el que fuera excelente jugador de balonmano del Barcelona y de la Selección española, bendecido en reales nupcias tras su brillante carrera deportiva, Iñaki Urdangarin; hace ha, decía, que está comprometido con una de las cuestiones judiciales más señeras de los pelotazos patrios, léase, caso Palma Arena, por el que está ya ajusticiado provisionalmente el antiguo ministro de Medio Ambiente de la era Aznar y posterior presidente del Gobierno balear, el infame, Jaume Matas al que se le pidió la mayor fianza económica pedida a un político español: tres millones de €. Además, también está implicado en este descalabro financiero y sospechosamente supuesto enriquecedor de patrimonios encubiertos, el que fuera vicepresidente de la excelsa fundación Nóos y hombre de confianza del yerno del Rey, es decir, el hombre de paja del yernísimo, José Luis Pepote Ballester, que también fue un destacado deportista, no sé de qué disciplina relacionada con el agua.
Está imputado Ballester pero no lo está aún Urdangarín, algo que podría atentar contra el sentido común porque el que era presidente, alma máter y creador de ese instituto volátil no era otro que el ex-jugador de balonmano.
También está conectado con otros jugosos contratos etéreos convenidos con el ex-president del Gobierno valenciano el también infame, Francisco Camps, pero no pudo hacer carrera en el Comité Olímpico Internacional (COI) ni en el Comité Olímpico Español (COE) -al que pretendía presidir- cuando se conoció en el organismo internacional que el entorno"samaranchnista" estaba inmerso en asuntos de comisiones ilegales.
Por lo que han dejado traslucir en el caso Palma Arena se cobraban facturas enormes por jornadas relacionadas con el deporte y el turismo y otro asuntos filantrópicos relacionados con el supuesto objeto del Instituto Nóos, pero al parecer al juez balear, José Castro, no le cuadran las cuentas y ha ordenado a la Fiscalía Anticorrupción del TSJ de Baleares que investigue qué desaguisado se ha podido producir ahí.
Curiosamente cuando el caso Palma Arena comenzó a andar por los procelosos pasillos judiciales de Palma, los Duques de Palma emigraron a Washington porque había no sé qué motivo laboral esperando al Duque y porque sus numerosos retoños debían, como hijos bien, conocer el idioma inglés que es el lenguaje de los negocios. Poco tiempo antes adquirió, junto a la infanta Cristina, una lujosa propiedad en el exclusivo barrio de Pedralbes en Barcelona.
Sin embargo, hay quien ha escrito que las razones migratorias dadas fueron las oficiales, pero que en realidad se debían a que se barruntaba un oscuro futuro judicial y había ansiedad en la Casa Real y consideraron los fontaneros de Zarzuela que la lejanía podía ser un antídoto, aunque al parecer no está surtiendo los efectos deseados.
No olvidemos que esa estancia en Washington está costando una pasta a nosotros, contribuyentes españoles, porque sin que conozcamos cómo y quién paga la estancia, sí está claro que se paga un gran número de personal de seguridad, además, de los asesores que les correspondan en función de la grandeza que representan, sin contar los constantes viajes oficiales que hacen a España y otros países.
No sabemos cómo acabará este asunto judicial, pero los medios de comunicación ven el panorama muy negro para el yerno del Rey. Pero, ojo, que no tiemblen los cimientos y tampoco es necesario que os agarréis a la silla mientras leéis esto, ya que se trata del yerno del Rey y cuando está la Corona de por medio todo quedará impolutamente archivado. Al tiempo. A lo sumo, si la cosa pinta muy mal, se provocará un divorcio como ya ocurrió por otros motivos, con el otro yernísimo y Urdangarín se las tendrá que arreglar en esa terrible caída libre. Así funcionan las monarquías. Así sobreviven.
Ya lo dijo el Tribunal Constitucional en su famosa sentencia sobre el artículo 14 de la Constitución: "iguales entre iguales y desiguales entre desiguales". Una frase genial, sin duda, que aún a mí me tiene cautivado (¿por qué no se me habrá ocurrido a mí, copón?).

26 septiembre 2011

NO HAY TIEMPO PARA EL DEPORTE


Cuando llega el momento de los reconocimientos médicos en mi centro de trabajo, a veces llega el pánico o la decepción o la frustración. En esos días todo el mundo sale algo tocado e, invariablemente, los médicos aconsejan ejercicio, dieta sana y vida sana en general. No estoy rodeado de obesos o dilapidadores de salud pero, sí, en muchos casos la salud deja mucho que desear. Y es, entonces, cuando llegan las inquietudes y las propuestas e intenciones de hacer más ejercicio y vida sana, aunque, lamentablemente ese impulso no dura más de una semana. Y, claro, al año siguiente vuelven las malas noticias, aderezadas además de más alarmismo porque se tiene un año más.
A la semana de iniciar un plan sano, casi todo el mundo vuelve a su rutina diaria y si se andó durante unos días o se nadó e, incluso, -en el menor de los casos- corrió, todo eso pasa pronto al olvido, justificando todo el mundo no tener tiempo para hacer deporte.
Es decir, ¡que no se dispone de media hora diaria y una hora los fines de semana! Esa es una frase preconcebida que cada día me creo menos. Todo el mundo dispone de tiempo para hacer deporte si su motivación es alta y su hábito estable, pero ocurre que siempre se posterga ese rato dedicado al deporte porque se da prioridad hasta a lo más ínfimo, entre lo que se incluye estar haciendo zapping durante más de media hora o lo que es peor, deteniéndose un rato en Tele5.
Se piensa o al menos a mi me lo dicen que los que corremos lo hacemos porque estamos dedicado a ello. Pero no es verdad. Ni estamos dedicados a esto por obligación o profesión alguna, ni nadie nos obliga. Nos obligamos nosotros mismos.
Es más, en ocasiones, -suelo decir- para poder sacar una hora para correr tengo que salir a horas intempestivas o no habituales y renunciar a otras cosas importantes. De hecho, sin ir más lejos, el pasado domingo, sabedor de la complicación de la agenda, corrí durante once kilómetros a las tres de la tarde, no bajando el termómetro de los treinta grados. Pero lo más curioso es que corriera esa distancia en apenas cincuenta minutos, a pesar del fuerte calor. Si yo puedo, todo el mundo puede hacerlo o al menos intentarlo, aunque me temo que eso es mucho pedir.

22 septiembre 2011

HOY HE SIDO OTRO


La majestuosa torre barroca de la Catedral de Guadix (foto debida a Paqui-Roberto)

Hoy en el entrenamiento he sido otro. Marcado aún por esa mediocridad en la Media de Guadix y por el nefasto entrenamiento del pasado martes -sin embargo, el lunes tras la media el entrenamiento fue muy bien-, salí con la sola intención de rodar y, con paciencia -que es una estupenda herramienta para el corredor- esperar a que vayan llegando las buenas sensaciones y los ritmos más rápidos; de hecho, elegí la ruta de Caparacena para hacer esos rodajes que me vayan introduciendo en el buen camino, pero como esto del correr es totalmente impredecible, desde el primer minuto percibí que hoy era otro y que iba liviano y con buenas sensaciones, sin buscarlas. Así que aproveché para hacer un rodaje controlado a un ritmo medio-alto -en torno a los 4'15'' los últimos cuatro kilómetros-, tal y como me aconsejó Alfredo.
Y seguí percibiendo que ese ritmo lo podía llevar con cierta facilidad a pesar de la dificultad del terreno que es algo picado. Incluso, hubo trayectos largos en los que rodaba con facilidad a 4'05'' y así pude continuar hasta completar esos nueve y pico kilómetros que tiene este circuito que suelo hacer con asiduedad. De manera que cuando estiraba y devoraba el obligatorio plátano abrigaba esperanzas de rodar mas rápido en las pruebas que quedan antes de que acabe el año y comenzar con ganas a preparar el Maratón de Madrid que, con muchas posibilidades, volveré a correr, pero aún queda mucho trabajo que hacer.

21 septiembre 2011

WACKEN OPEN AIR: KREATOR

La teutona y veterana banda de Essen, surgida en 1982, tiene un ejército de seguidores en todo el mundo. Y fuí testigo de ello cuando estaban anunciados por estos lares y atrajeron a cientos de fans, los mismos que luego se encolerizaron cuando anunciaron que no actuarían bien porque había surgido algún imprevisto o, sencillamente, porque jamás estuvieron contratados y eran un reclamo del cartel -algo habitual en este mundo metálico- y esa sospecha encolerizó a sus seguidores con más acritud que su no presencia.
Es una banda mítica para algunos que suele cultivar el thrash metal, pero que he de reconocer no está entre mis preferencias a pesar de que el thrash metal es una de mis opciones preferidas en cuanto a ritmos metálicos, pero claro cuando conoces el que cultiva Metallica ya nada es igual, al menos en mi opinión.
Actuaron en el Wacken del 2011 tal y como se puede ver en este vídeo de You Tube.

18 septiembre 2011

IV MEDIA MARATON CIUDAD DE GUADIX (18/9/2011)


Con Mario (que ha vuelto a clavar su buen tiempo del año anterior), minutos antes de la salida.



Cuando el joven camarero del restaurante Ruta del Sur de Purullena me preguntó cómo había quedado no supe que responderle. En algún lugar indeterminado, balbuceé. Posteriormente el joven camarero, con aspecto de corredor, aunque no corría de manera habitual (aunque sí le gustaba correr), probablemente, a modo de excusa comenzó a hablar de la dureza de este terreno.
Podría haber utilizado su propio argumento para, aferrándome a modo de excusa, justificar mi más que discreto crono, pero eso hubiera sido más un argumento mas exculpatorio que veraz y, además, poco podría interesar ese tema al joven camarero que lo único que pretendía era ser amable y de camino conocer algo más de la prueba.
Sí, es dura. La más dura de las cuatro medias maratones que tiene la provincia de Granada, sin duda, acabé confesándole antes de bajar la cabeza y seguir ojeando Ideal mientras tomaba una fresquísima cerveza.
Lo cierto es que no he tardado más, pero tampoco he tardado menos que el año anterior. He clavado el mismo discreto crono, corriendo a una media de cinco minutos el mil (el año pasado la organización me daba 4'59'' el mil), sin que tenga importancia que haya tardado treinta segundos en atravesar la salida ni que la prueba tuviera casi trescientos metros más de los indicados.
El caso es que estoy a un año vista tal como estaba. Mantengo el mismo peso y mantengo ritmos idénticos en pruebas idénticas. Por medio ha estado el Veleta y los test realizados, pero éstos no aportan velocidad aunque sí es posible que resistencia y fuerza, que habrá que intentar hacer explotar.
¿Pero cómo me he visto en cuanto a resistencia y fuerza? No mejor que el año anterior. De hecho, la falta de rodajes largos en el último mes y medio se ha dejado notar desde el kilómetro 17 y coger un ritmo por debajo de 4'30'' sólo ha sido posible en el escaso terreno picado para abajo. En verdad, no esperaba otra cosa, como ya venía observando en los últimos y escasos entrenamientos.
La Media Maratón de Guadix no es una prueba fácil para demostrar que se está en forma, sin lugar a dudas. Su abundante trazado roto, repleto de vaivenes, la dificultad del terreno en los cinco o seis kilómetros antes de llegar a Guadix e, incluso, esas insensatas cuestas antes de la meta, hacen de esta prueba una carrera difícil, mucho menos asequible que la Media Maratón de Granada, por poner un sólo ejemplo.
Como bien me decía Francis Rodriguez Tovar (cuarto en esta prueba), al que agradezco que se asome por aquí de vez en cuando, todo el mundo habla de la subida a Purullena, pero es mucho más dura la segunda parte de la carrera. Es cierto.
Sin embargo, a pesar del mediocre crono, el objetivo personal está más que cumplido, que no es otro que buscar ir afinando de cara a las próximas medias maratones y, principalmente, cerrar la etapa del Veleta que deja algo desgastados los músculos.
Por ahora, el objetivo de acercase a los noventa minutos está algo lejano por lo que el entrenamiento específico de velocidad en las próximas semanas será decisivo para acercarse a ese tiempo.
Sin embargo, a pesar de todo, he vuelto a disfrutar corriendo, que es lo importante.

17 septiembre 2011

UN AÑO MÁS, EN GUADIX



Tras las lógicas dudas iniciales posvacacionales, finalmente este corredor trotará por Guadix y sus alrededores. Sin duda, es una excelente prueba para afinar en las próximas medias de otoño, que vienen raudas y sin descanso.
Sí, es una prueba idónea para ese cometido porque no se trata de una prueba fácil. A lo largo de su trazado hay cuestas -no excesivas- y terreno quebrado y picado. Por tanto, buscar un buen ritmo estable no es tarea fácil en aquel terreno. Además, presumiblemente hará calor, quizá más calor que en años anteriores porque este septiembre intenta ser una copia del pasado agosto.
Muchos ingredientes para estar allí y correr con tranquilidad aunque no sin esfuerzo, que éste siempre hay que hacerlo cuando se trata de correr 21 kms.
Buscaré a ver si es posible la hora y cuarenta minutos, pero no será nada fácil porque estoy poco rodado.

16 septiembre 2011

LAS BUENAS SENSACIONES REGRESAN DE LAS VACACIONES

Si el pasado jueves corría torpe y con sensación de pesadez y debilidad, en esta mañana de viernes a eso de las nueve horas, cuando aún el sol apenas calentaba, me sentía mucho más ligero y versátil y eso es porque las sensaciones que estoy buscando con paciencia por los caminos y carreteras van llegando poco a poco. 
La vía más rápida para que éstas lleguen es llevar a cabo esas sencillas técnicas que esbocé en la entrada anterior: no forzar, correr sin mirar el tiempo y buscar rutas nuevas, que sean amenas. Y un factor importante y principal: la paciencia. 
En esta mañana de viernes hacía más de diez kilómetros rocosos, rodando entre caminos de olivos; caminos rotos y serpenteantes que tan bien van para procesos recuperatorios. Caminos que ayudan a reforzar las piernas y aclarar los pulmones y, de camino, eliminar esos gramos de más que se adquieren cuando se sale de viaje turístico (ya he comentado en más de una ocasión que cuando estoy fuera no escamoteo un buen filete, la cerveza que se tercie y los postres que me propongan. Pero, eso sí, no tomo copas). 
Y con las buenas sensaciones llegan los nuevos proyectos. Y éstos -junto a lo ya corrido a lo largo del año- serán objeto en breve de una nueva sección en la parte derecha de vuestras pantallas. En el horizonte se barrunta, incluso, alguna maratón.    

UN NUEVO PROYECTO ARRIESGADO

  Tras acabar mis dos últimas novelas, Donde los hombres íntegros y Mi lugar en estos mundos , procesos ambos que me han llevado años, si en...