HIENA: EL INFIERNO DEL CRIMEN (U.K., 2014)
Hiena es una peculiar película centrada en los bajos fondos de la droga y el mercado sexual, venido del este de Europa, en Londres y la corrupción policial. Una película oscura, desarraigada, dura, cruel y muchos adjetivos más del mismo estilo, pero al mismo tiempo muy humana. Porque es así la condición humana, tanto para lo peor como para lo mejor. Personajes turbios, que viven encarcelados en su propia inercia de crimen, corrupción y horror, bajo el manto oscuro de la noche londinense. Impactante banda sonora y cuidada fotografía, que aportan todos los ingredientes necesarios para este film de cine negro británico, que no son distintos a la mismísima realidad de crimen, droga y mercado sexual por la que atraviesa Europa.
EL APOSTOL (Francia, 2014)
Esta película francesa de 2014 abre los ojos. O al menos, nos informa de una realidad muy desconocida, como es la conversión de musulmanes al cristianismo, que es algo que está bastante tapado para la opinión público y desconozco quién se aprovecha de ese tapado. Sabemos de la conversión de cristianos a la religión de Alá, pero no al revés. El cristianismo tolera esa conversión, pero la religión musulmana no tolera la apostasía, sobre todo si es para la conversión a una religión politeista. Porque para ellos, la religión cristiana lo es, al admitir la existencia de dos dioses. Dios, el principal, el del Antiguo Testamento, y la posterior conversión de su único hijo Jesús en Dios, en el Nuevo Testamento. Y eso parece demasiado para los musulmanes, que tan solo reconocen a un Dios, Alá, y su profeta Mahoma. Curiosamente en el Corán también aparece Jesús, pero tan solo como profeta, que eso si lo admiten.
La película se centra en una moderna familia musulmana de Argelia, totalmente integrada en Francia, en la que la religión musulmana es respetada por todos y radicalizada por algún miembro de la familia. Que uno de ellos acaricie la doctrina cristiana es un hondo problema.
Esta película me ha interesado sobremanera porque me ha ayudado a conocer la realidad interna del conflicto de las dos religiones -o al menos la de sus seguidores, si bien, hay que decir, el conflicto está más instalado en el lado musulmán- en los países europeos democráticos. No podría afirmar categóricamente que se trate de una película procristiana, pero sí hay un claro mensaje al final de la misma, en la que se denuncia las pésimas condiciones de vida de quienes profesan la religión cristiana en países árabes, algo que no es recíproco en los países de amplia raíz cristiana.
Aconsejo verla.
FORSAKEN (Canadá, 2015)
¿Un western canadiense hecho en 2015? Parece extraño, sí, pero es eso lo que vi el otro día. Su título Forsaken. Y sorprende también que esté protagonizado por grandes actores, sobre todo, el octogenario Donald Sutherland, el cual aparece acompañado por su hijo -en la realidad y en la ficción- Kiefer. Cuenta con todos los ingredientes del western: forajido reconvertido (el filón de Sin perdón no tiene límite), una ciudad sin ley, pistoleros a sueldo, un cacique sin escrúpulos que machaca a los humildes granjeros y campesinos para quedarse con sus tierras, una BSO clásica....Nada nuevo. Sin embargo, todo bien trenzado. Es como si su desconocido director Jon Cassar hubiera querido ofrecer un homenaje al género western de los años cincuenta y anteriores. El resultado es una película de hora y media predecible, pero bastante entretenida, con un final muy a lo Sin perdón, que para mí es a la película que se quiere homenajear de manera más evidente. No sé, a ver qué opináis una vez vista.
FORSAKEN (Canadá, 2015)
¿Un western canadiense hecho en 2015? Parece extraño, sí, pero es eso lo que vi el otro día. Su título Forsaken. Y sorprende también que esté protagonizado por grandes actores, sobre todo, el octogenario Donald Sutherland, el cual aparece acompañado por su hijo -en la realidad y en la ficción- Kiefer. Cuenta con todos los ingredientes del western: forajido reconvertido (el filón de Sin perdón no tiene límite), una ciudad sin ley, pistoleros a sueldo, un cacique sin escrúpulos que machaca a los humildes granjeros y campesinos para quedarse con sus tierras, una BSO clásica....Nada nuevo. Sin embargo, todo bien trenzado. Es como si su desconocido director Jon Cassar hubiera querido ofrecer un homenaje al género western de los años cincuenta y anteriores. El resultado es una película de hora y media predecible, pero bastante entretenida, con un final muy a lo Sin perdón, que para mí es a la película que se quiere homenajear de manera más evidente. No sé, a ver qué opináis una vez vista.