26 abril 2013

Voy flojo para la prueba del 'Padre Marcelino' del próximo domingo. Pero no pensaba fuera a ir más fuerte. En absoluto. 
Cuando sales de una lesión, suele ocurrir. Luego, llega el día a día y algunos problemas para encontrar espacio temporal o ganas para entrenar. El resultado es poquísimo entrenamiento y alguna lucha contra la báscula, que son conceptos que van mu unidos para los corredores. Aún así, la prueba en sí es un excelente ejercicio de calidad porque te dejas llevar por las circunstancias, por la marea humana y por las calles de la ciudad. Vas fuerte. Mucho más que en un entrenamiento rutinario. 
No obstante, rodaré el sábado por la mañana, no más de nueve o diez kilómetros para adecuar un poco el tono muscular e intentaré disfrutar de la prueba, que es de lo que se trata. 
No corrí la edición del año pasado -no recuerdo por qué- pero sí la del 2011, por lo que dejo aquí el enlace de la crónica de aquel año, que siempre podrá venir bien a alguien.  Aconsejo leerla; porque a mí mismo me ha venido bien hacerlo. Suerte a todos y nos vemos en las calles de Granada.

PRUEBA PADRE MARCELINO 2011 

24 abril 2013

SAUCONY POWERGRID TRIUMPH 9: PRIMER TEST


Doce kilómetros han bastado para poder emitir un breve veredicto sobre el comportamiento de la que es, probablemente, una de las mejoras zapatillas del mercado: Saucony PowerGrid Triumph -la versión 9, en este caso-, tope de gama de la firma norteamericana. Pero no voy a referirme aquí a conceptos técnicos; esos son muy fácil de consultar en cualquier página especializada de Internet. Me referiré a mi primera experiencia con ella, que es lo que cuenta.
A primera vista -como indicaba en la entrada anterior- sorprende su perfil de talón 'bajo'. Esperas encontrar un talón más alto, ya que se trata de una zapatilla de horma neutra fuertemente amortiguada, pensada para corredores de peso medio y alto. Pero inmediatamente compruebas el motivo que ha llevado a Saucony a esa solución. Se trata de una solución sencilla pero muy ocurrente. Con la idea de que el corredor talonee lo menos posible y sea más eficaz su zancada, se ha dispuesto una buena parte de la amortiguación del talón 'incrustada' en la parte superior del mismo, en la parte no visible. De esa manera la parte del talón visible es más pequeña -para evitar el taloneo excesivo-, siendo la amortiguación igual de eficiente. Para imaginar gráficamente esta solución, pensemos en un iceberg, pero a la inversa. 
Esa solución técnica viene de perlas, no sólo para talonear mucho menos, sino para evitar ese molesto e ineficaz taloneo en las subidas, que provoca en el corredor un esfuerzo mayor al usar el talón como impulso, cuando tendría que ser la zona del antepié la que impulsara la zancada y poder subir de manera más efectiva. Lo comentábamos Juan Carlos y yo en la pronunciada subida de la zona de 'Los Cortijos' en dirección a Caparacena. Hemos detectado que la subida era mucho más técnica al no existir apenas taloneo, así como más solvente.
Otro aspecto que es muy apreciable es el poco peso -tan sólo 309 gramos- de la zapatilla para la enorme amortiguación que tiene. Realmente se experimenta una sensación muy agradable al apreciar tan fuerte amortiguación a pesar de sentirla tan ligera. La amortiguación es también fabulosa en la zona del antepié.
Otro aspecto a destacar es la transición perfecta entre el antepié y el talón. No ocurre así en otras zapatillas, en las que observas una mayor torpeza en esa transición, provocando a veces algún desagradable doblez en la zona de los cordones. No es así en esta zapatilla. 
Por cierto, es fenomenal el cordonaje que trae esta zapatilla. Su cordón plano da la sensación que jamás se va a desatar. 
Por tanto, he de decir que su adquisición ha merecido la pena y a un precio más que competitivo.

23 abril 2013

ERAN NECESARIAS

Si de lo que se trata es de hacer un buen número de kilómetros en primavera y en verano eran necesarias. Son de sobra conocidas por cualquier corredor de fondo que se precie y no necesitan apenas presentación; pero aún así las presento: 




Se trata de la versión 9 de las ya míticas Saucony PowerGrid Triumph, la gama alta de la firma americana, probablemente una de las zapas que menos defraude a propios y a extraños. Recién llegadas de la Pérfida Albión. 
Tuve hace unos años la Triumph 4, y después la versión 7, de idéntico color a las que ahora he adquirido, si bien Saucony ha ido versionándola y mejorándola (ahora acaba de salir la versión 10)  hasta conseguir hacer una zapatilla neutra prácticamente perfecta. Y gracias a que con éstas me fue muy bien, he vuelto a confiar en este modelo.
Se comenta que Saucony se ha inspirado en la que se dice fue su mejor versión -la 4- y a partir de ella ha construido la 9, apreciándose a primera vista -aún no he corrido con ella- su talón más estilizado y algo más bajo para evitar un taloneo excesivo, al tiempo que asegura una mejor amortiguación porque como es propio en la alta gama de todas las marcas, la amortiguación está muy cuidada. 
También se han esmerado mucho en la amortiguación del antepié y han mostrado mucho  interés en los corredores que suelan utilizar plantillas para correr, al ofrecer una horma generosa y lo suficientemente amplia para que entre cualquier tipo de plantilla. Todo en ella inspira confianza y una depurada técnica, no se deja nada a la improvisación.
Al parecer -ya digo, aún no las he probado- su amortiguación no es tan dura como la de las versiones anteriores, sin que eso significa que pierda un ápice de efectividad,  lo que hace de esta zapatilla un modelo idóneo para corredores neutros y supinadores leves que pesen entre 70 y 100 kilogramos de peso. En mi caso, que estoy en torno al peso medio, se convierte en una zapatilla ideal para rodar en los entrenos a ritmos inferiores a los 5' el mil o, incluso, a ritmos inferiores de 4'30'' el mil en competición. Rodar por encima de los 5' el mil tampoco se convierte en un problema para esta zapatilla.
Dudé entre ésta y la nueva versión de la Ride. Poseo la Ride 3, que es una zapatilla excelente; ideal para series, competición hasta media maratón y rodajes rápidos. Sin embargo, hay que decir que cuando se superan los 50 kilómetros a la semana, el cuerpo y las piernas piden algo más amortiguado. Tengo, recién entrenadas la Supernova Glide 3, algo más idónea para altos kilometrajes que la Ride 3, pero aún así, para una mayor carga de kilómetros es mucho más efectiva y fiable la recién adquirida.
Insisto siempre a quien me pregunta y me pide opinión que opten siempre por una buena amortiguación. Al menos una amortiguación idónea para su peso corporal y que no se dejen impresionar por las voladoras que es un concepto de zapatilla para corredores muy concretos: gente con muy poco peso y que rueden a ritmos por debajo de los 4 el mil en competición. Además, es muy importante también que siempre posean varios pares de zapatillas, porque sólo de esa forma se puede optar por zapatillas algo más ligeras para entrenamientos de calidad o competición, por la sencilla razón de que en ambos casos se trata de sesiones aisladas  -no diarias- y por lo general con poca carga de kilómetros. En cambio para el trabajo más rutinario y más o menos diario, nada como una buena amortiguación que nos proteja de las temidas lesiones.

También ha sido 'agraciado' con otro par de Triumph 9 Juan Carlos, mi último compañero de 'correrías'. Él, fanático de las Nimbus, confió en mi criterio y creo que no le voy a defraudar. Mañana o pasado lo veremos.           

22 abril 2013

UNA VISITA A LOS RESTOS ARQUEOLÓGICOS DE 'EL CERRO DE LOS INFANTES' -PINOS PUENTE-


La visita a las muy escasas ruinas de lo que se documenta como  necrópois y -posteriormente- municipium 'ibero-romano' de Ilurco se ha hecho esperar, pero al final se ha producido. 
Era una 'excursión' que le tenía prometida al profesor y escritor granadino José Luis Serrano -autor de Zawí- y que por fin tras diversos aplazamientos hemos podido llevar a cabo este domingo pasado. 
Poca gente que haya nacido en Pinos Puente no conoce, física o a través de testimonio indirecto, lo que guarda el conocido como 'Cerro de los Infantes' (ver mi entrada sobre esta zona), y son muchas las personas que han encontrado monedas, restos de cerámica e incluso algún exvoto íbero que otro. Pero era necesario visitar la zona con cierto conocimiento de lo que podríamos encontrarnos allí, de acuerdo con las prospecciones arqueológicas -pocas e incompletas- que han llevado a cabo arqueólogos en épocas pasadas. 
Probablemente no era la mejor época, porque ha llovido mucho este pasado invierno y en el comienzo de la primavera, de manera que el follaje era inmenso, pero aún así, ambos hemos conseguido ascender a lo conocido como 'corona', lugar en el que se estima podía estar construida la fortaleza militar, el 'oppidum' ibérico, el cual pudo servir para que Roma pusiera allí su impronta en forma de fortaleza  y posteriormente la civilización islámica en forma de alcazaba. Que se sepa, nunca fue fortaleza cristiana. 



Hemos podido ver tenues restos de murallas y unos escalones bien construidos sobre los restos en roca de la misma, que según las inscripciones (1937) debieron ser utilizados por los soldados de la zona republicana durante la Guerra Civil española.



Ya en la meseta que conforma la 'corona' -con unas impresionantes vistas a la Vega y a los Montes Orientales- hemos podido ver lo que se estima una poza grande utilizada para tintar tejidos de posible estructura fenicia, según los expertos. 
En la zona de bajada, en una especie de valle pequeño es posible ver restos de muralla (de posible procedencia íbera), la cual ha sido prácticamente destruida por una antigua construcción vulgar de una vivienda de una sola planta. 


Como comentábamos José Luis y yo, seguramente habría mucho por descubrir si existiera la voluntad de iniciar nuevas prospecciones arqueológicas, algo que es factible que se haga en cualquier momento gracias a que la zona está legalmente protegida y reconocida. 


Desde lo alto de la 'corona' es fácil otear todo el horizonte en un ángulo de 360 grados sin problema alguno, que es el fin que se pretendía cuando se construyó el 'oppidum'. Incluso, sería posible visualizar la probable fortaleza en alto que seguramente presidía la probable antigua ciudad de Ilibiris, junto a la población de Atarfe, dato que podría ser nada relevante para los poblados íberos, ya que éstos extendían su 'soberanía' tan sólo a su población. No había concepto de Estado. 
En los momentos en el que follaje nos llegaba hasta la cintura, no pude evitar pensar en la presencia de la víbora hocicuda, comunes en esta zona (en toda España, excepto en el norte) según los testimonios que siempre he escuchado y que ambos hemos comentado. Además, en primavera comienzan su ciclo de celo y es cuando se ciernen más peligrosas, a pesar de que su veneno, al parecer, no es tan tóxico como el del resto de las víboras. Por suerte no nos hemos topado con ninguna. He preferido alejar ese pensamiento y centrarme en los restos, como es fácil deducir.    

21 abril 2013

BUSCANDO LA FORMA

Son ya más de 70 kilómetros los recorridos desde que comencé a correr tras la lesión, pero aún no está olvidada. Mal haríamos si ninguneáramos las lesiones, si las olvidáramos para siempre. Tampoco se trata de vivir obsesionados con la última lesión, pero es inevitable que cualquier escaramuza en la zona lesionada, cualquier tenue dolor, cualquier leve pinchazo provoca alarma. 
Ando buscando la forma a paso firme. Por lo pronto, la prudencia conlleva la progresividad en los entrenos, tanto en kilómetros como en ritmos. Nada de calidad -por supuesto-, ni rodajes rápidos, procurando mezclar terrenos asfaltados con otros terrenosos. Además, procuro calzarme las zapas menos gastadas por los kilómetros, para asegurar la mayor amortiguación posible (por supuesto, no creo en el run free o como se llame esa nueva tendencia, pero sí es muy beneficiosos andar descalzo por la playa o por el césped). 

Esta semana pasada ha sido escasa en rodajes. No más de 35 kilómetros repartidos en tres salidas, pero éstas han sido buenas en sensaciones y en progresividad. 
Comencé el pasado miércoles con un rodaje urbano de 10 kilómetros a un ritmo medio de 5'07'' el mil. Las sensaciones no fueron las mejores, porque aún encontraba las piernas algo cansadas por las rampas de Alhama, pero el objetivo era rodar y no otro.
El jueves con fuerte calor, Juan Carlos Álvarez -asiduo del Circuito provincial también- y yo llevamos a cabo un bonito rodaje, sumergiéndonos por la Vega más auténtica, pasando por terrenos de los municipios de Pinos Puente, Santa Fé y Fuente Vaqueros. Fue un rodaje tranquilo de 13,5 kilómetros y medio a un ritmo de 5'33'' el mil; y el sábado salí a rodar sólo 10,5 kilómetros a un ritmo algo más exigente -5' el mil- encontrando en este último rodaje mejores sensaciones que los dos rodajes anteriores. Por tanto, esa planificación progresiva va funcionando perfectamente. 
El próximo domingo habrá una prueba rápida: la del Padre Marcelino. Se trata de un circuito totalmente urbano de 10 kilómetros homologados y su perfil es llano. Por tanto, si consigo entrenar bien durante la semana y continuo con esa progresividad podría atreverme a rodar a 4'30'' el mil, aunque será la carrera la que me ponga -nos ponga- en nuestro sitio. Para tal fin tendría que rodar en alguno de los entrenos a 4'50'' el mil durante 12 kilómetros. Si lo consigo, no creo que tenga problemas para rodar el domingo al ritmo indicado.       
Y pensar que ese domingo tendrá que estar en el Maratón de Madrid, de acuerdo con mis planes de principios de año.

19 abril 2013

MÚSICA: DREAM THEATER (USA)

¿Quién no ha disfrutado con el metal progresivo de Dream Theater, una banda estadounidense que muchos consideramos de culto. Son unos intérpretes excelentes. Es más, yo diría que geniales. Porque pocas veces surge una banda con esa conjunción de talento en todos sus miembros (tanto los presentes como los antiguos). Llevar casi 30 años de forma ininterrumpida en la música ya de por sí es algo encomiable, pero seguir siendo fieles a su exquisito estilo es ya algo único. Un estilo que en algunos trabajos se ha decantado por el metal progresivo, pero en otros ha habido irrupciones de rock progresivo, existiendo entre ambos una tenue frontera, en ocasiones, imperceptible en estos virtuosos de la música.
Suelen utilizar guitarra eléctrica, bajo eléctrico, un portentoso teclado y una portentosa batería. Su actual vocalista, el canadiense James LaBrie, sólo se dedica en exclusiva a la voz y su estilo hace que se identifique inmediatamente a la banda. También hacen coros algunos de sus miembros. Es muy identificable la guitarra eléctrica y el bajo; pero es baldío aquí hablar de identificaciones porque todos y cada uno de los miembros de la banda aportan su estilo propio, que a la vez, en suma, generan ese inconfundible sonido de Dream Theater. Lamenté mucho no poder verles en directo cuando hace algunos años actuaron en Atarfe (Granada).
Hay que escucharles porque de hacerlo de manera frecuente -a mí me ocurrió- se convertirán en imprescindibles en tu discoteca. Aquí les vemos en un directo en 2006.

       
  

17 abril 2013

EL MUSEO DE CERA ACABARÁ CERRANDO

Acabará sucumbiendo a un ERE (que no se entere Griñán) a este ritmo. O eso o crear una sala de corrupción que puede ser algo muy molón y con mucho futuro. Imaginénse a los abueletes del Imserso de la provincia de Albacete en fila india dirigirse a ver al Urdanga, al otro yernísimo (el del patinete -¿cómo se llamaba?-) a la Pantoja, después de visitar a su paisano Iniesta, expectantes por ver al yerno listorro y a la tonadillera. 
No sería mala idea. Un amigo decía que hay que hacer negocio de lo que se tenga. Proponía cosas tan pintorescas como crear escenas ficticias de bandoleros en Andalucía -como con los western en Tabernas-, pero que los protagonistas fueran los políticos de la Junta. Algo así podría hacerse en el Museo de Cera, propongo. 
Porque no cabe duda que alguna sombra de preocupación ya estará rondando entre los trabajadores del mediático museo madrileño, que observan con inquietud cómo cada día hay más huecos en las salas, siendo lo preocupante que no se trata de huecos que pasen desapercibidos, todo lo contrario. 
También sería buena idea - si no prospera la sala de la corrupción, que así la vamos a bautizar-, crear una especie de sala de los sablazos al dinero público, con explicaciones muy precisas y documentadas acerca de la pericia de la versión humana de los muñecos de cera a la hora de extorsionar, blanquear, robar, mangonear o enviar fondos a paraísos fiscales. Eso quedaría la mar de didáctico. 
Por tanto, trabajadores del Museo de Cera, si por un casual leéis ésto, haced el favor de plagiarme la idea e ir pensando en lo que escribo, que a este ritmo quedará Iniesta, Casillas y pocos más. Y gracias a que a los futbolistas se les deja en paz, que para eso son nuestros héroes campeones del mundo mundial.   

16 abril 2013

SOBRE REDES SOCIALES Y LA AFICIÓN DE ESCRIBIR

Dicen las afiladas lenguas cibernéticas que a quienes nos gusta escribir creamos un blog; y al que le gusta menos, se conforma con tuitear. Sin embargo, mucha gente -entre los que me incluyo- posee un blog y una cuenta de Twitter. Pero para quien esto susbribe no hay color: prefiero el blog. 
A pesar de que escribir en esta pantalla en blanco (vosotros veis un texto más o menos largo; más o menos coñazo; más o menos interesante, pero quienes escribimos un blog nos enfrentamos a una pantalla en blanco casi a diario) y en ocasiones no tenemos ni idea qué contar; es más, hay que hacer filigranas para no repetirse. Pero nos gusta escribir, me gusta escribir. A pesar de que en ocasiones no tenga ni idea de quién hay al otro lado; es más, escribir con la casi seguridad de que al otro lado, en muchas ocasiones, no hay nadie. Pero escribir -qué duda cabe- es un ejercicio individual y siempre es mejor escribir sin considerar quién te pueda estar leyendo. Esa es la humildad inherente a este ejercicio, algo muy similar a lo que supone correr. Cuando escribes cabe la posibilidad que nadie te lea; y cuando corres existe la casi absoluta certeza que no ganarás nada y, sin embargo, subes rampas, bajas cuestas,  atraviesas caminos y carreteras, a pesar de tener la certeza de tu mismidad y el cierto onanismo que comporta devorar kilómetros en soledad.  
Pero volviendo a lo de las redes sociales. Hace no mucho creé una cuenta de Twitter (básicamente para comunicar lo que escribo en el blog) y enseguida comprendí que este tipo de cuentas son almas de doble filo. Por lo pronto, son grandes devoradoras del tiempo si no utilizas bien la cabeza. Y eso ocurre, porque la obsesión de tener seguidores puede conllevar que tu sigas a gente que jamás vas a leer. E, igualmente, ellos te siguen a pesar de que jamás te van a leer. En cambio, hay gente muy mediática -futbolistas, cantantes, famosos en general-, que les cuesta escribir los 140 caracteres que creo te ofrecen y, sin embargo, tienen millones de seguidores. No por lo que digan sino por lo que representan, por su imagen catódica y mediática. Por tanto, Twitter, Facebook o tras redes sociales similares, simbolizan muy bien lo frívola que es y lo enferma que está nuestra sociedad: no interesa leer ni la calidad o interés de lo que se diga, sino quién lo diga (estoy seguro que si Sergio Ramos -uno de los peloteros más activos y con más seguidores- cuenta que acaba de salir del baño, eso se convierte en un fenómeno social; así somos). Por tanto, cada cual tiene que utilizar estas herramientas de acuerdo con sus intereses y su personalidad. A mí me interesa de Twitter -por ejemplo-, no que me sigan (que seguramente lo harían y la mayoría no me leerán) o yo seguir a otros (a los que no leeré), sino descubrir páginas, blog y gente que escribe y hace cosas interesantes. Por ejemplo, me interesa mucho la tecnología de las comunicaciones y sigo blogs y páginas sobre estos asuntos; e, igualmente, me interesa la cultura y los libros, el sonido y la música, las cosas relacionadas con el correr, la nutrición, y un largo etcétera  y hago lo propio. Porque resulta que Twitter es muy útil como herramienta para descubrir cosas interesantes, que no es posible hacerlo meramente navegando, porque te pierdes.  
Por su parte, escribir un blog es otra cosa muy distinta. Insisto en que escribes porque te gusta hacerlo pero, en ocasiones -las que más- te sientes atravesando el desierto y la soledad es absoluta. Escribes entradas y el contador de comentarios se queda a cero y le salen telarañas; sabes que alguien te lee por ahí, pero tampoco estás completamente seguro, a pesar de que el contador de visitas insista en que sí.  Pero aún así es algo interesante porque conlleva la misma  soledad a escribir un relato, una novela o un artículo periodístico, cosas que publicas y que, realmente, no sabes el número de lectores que tendrán. Y suerte que Granada no es una ciudad excesivamente grande y siempre obtienes un reflejo de lo que has escrito, por una vía o por otra. Porque no hay que negar que toda persona que escribe, a pesar de que lo haga en soledad y sea una tarea solitaria, necesita saber que tiene lectores ¿Algo de vanidad? Sí, sin duda.     

14 abril 2013

XXIV PREMIO DE FONDO 'COMARCA DE ALHAMA' (14/4/2013)

Alhama de Granada, es un pueblo alto. Está a 895 metros sobre el nivel del mar; es decir, que es 157 metros más elevada que Granada. Y alta es su iglesia mayor, de estilo renacentista con decoración barroca, del siglo XVI. Pero aún así, la serpiente multicolor -que es un argot prestado del ciclismo- en que se han convertido las carreras populares, puede ver el tejado de esa iglesia. No me estoy refiriendo en estas primeras líneas a latitudes ni alturas, ni tampoco a monumentos, estoy intentando situar al lector -sobre todo al ajeno- sobre las fuertes subidas a las que se enfrenta el corredor en este histórico y vistoso pueblo del Temple granadino. 
Además, Alhama está lejos; a nadie le coge cerca. Es un pueblo estratégicamente situado por las distintas civilizaciones que lo han ido poblando y, aún hoy, en pleno siglo XXI, los accesos son malos. No me estoy refiriendo a su situación histórica y geográfica sino al importante esfuerzo que ha de hacer cada corredor para acudir allí, con independencia del rincón de Granada de donde proceda (o de la provincia de Málaga, porque a muchos de por allí he visto, ya que es tierra fronteriza con esta provincia; de otras provincias ya ni hablamos). 
Esfuerzo para acudir y esfuerzo para subir. Es el precio por enfriar esta pasión desenfrenada por correr y participar en pruebas de competición. 
Recuerdo que hubo años en los que acudíamos a Alhama unos muy pocos cientos, ahora son muchos los cientos. En esos años, se contemplaba un delgadísima línea que subía a paso continuo por esas rampas; ahora es una serpiente multicolor, como antes decía. Es la victoria del cuerpo sobre la materia; el ejercicio versus colesterol; el triunfo de las masas sobre la minoría. No obstante, jamás he visto tanta gente andando por esas rampas. Es lo que tiene: el deporte popular llega a todos -debe llegar a todos-, pero también se paga.

Y yo también he vuelto. Siempre vuelvo en esta carrera.
La cosa viene funcionando más o menos así: corro la primera de Armilla, me lesiono y ya no vuelvo hasta Alhama. Es un estricto código que últimamente está llevando a cabo mi organismo, que ya no suele volver a llamar la atención hasta comienzos del siguiente año. Si así lo quiere él, así lo admito yo. 
Pero reconozco que correr con prevención tiene sus ventajas. Te pones en el furgón de cola y no te preocupas de nada más que de seguir la estela de la serpiente. Si tus piernas te lo piden, las estiras y las alzas más; si no te lo piden te dejas llevar. Así de fácil.
Ese correr con prevención te impide sufrir menos también, porque en dos meses de parón se gana en prevención pero no se pierde mucha forma anaeróbica. Y no niego que así da gusto correr. Sufres lo justo; y lo justo es sufrir poco cuando estás recién recuperado. 
Además, es la mejor forma de reconciliarte con la carretera y con las pruebas populares. La mejor forma de saborear el suave elixir del deporte popular. Poder decir cuando has acabado tu prueba: he estado ahí y he disfrutado. La mejor forma de encontrar las sensaciones y las ganas para la próxima. 
Por cierto, feliz ocurrencia de ofrecer una camiseta técnica (excelente, por cierto). Si no me equivoco es la primera ocasión en que se desechan aquellas ásperas camisetas de algodón. Lo siento por el polvo de los muebles.

ACTUALIZACIÓN

http://paper.li/donzurreon/1355067670#!sports

13 abril 2013

ALHAMA, DE NUEVO


El año pasado la prueba de Alhama se celebró en idénticas fechas a las de este año, pero hizo un frío bestial y había llovido profusamente los días anteriores -no recuerdo si lo hizo durante el recorrido; creo que no-. Sin embargo, en la edición de este año, si el tiempo no lo remedia, las temibles rampas habrán de ser subidas con calor. Para muchos corredores es mejor así, pero yo lo tengo claro: prefiero el frío y la lluvia, aunque no el viento.

Y el destino ha querido que vuelva a recomenzar de nuevo en esta prueba. El año pasado fue exactamente igual: corrí la primera prueba de Armilla y ya no me reincorporé hasta la prueba de Alhama. Como ocurría en 'Atrapado en el tiempo', se vuelve a repetir la historia. 
Lo importante, sin embargo, es poder concluir la prueba con buenas sensaciones y sin problemas musculares a un ritmo lo más suave posible, saliendo en el furgón de cola, como es apreciable en la fotografía que el año pasado tuvo a bien hacernos Paqui a Roberto y a un servidor.
Pues nada, si alguien quiere 'torturarse' con la película de la carrera del año anterior, no tiene más que pinchar aquí 
Por lo demás, suerte a quien vaya a correr en tan bonita tierra. Nos vemos en la ruta.

11 abril 2013

REGRESO A LOS CAMINOS (OTRA VEZ)


Regresar a los caminos y retirarse. Dos caras de una misma moneda. El Yin y el Yang. Una parte importante de la 'Biblia' del corredor. 
Casi dos meses refugiado, esperando a que cierre la microrotura fibrilar en el gemelo interno izquierdo. Dos meses de paciencia hagiográfica, alternando las largas caminatas, con la MTB, las sesiones de elongamiento, las sesiones de abdominales, las sesiones de fisio. O sea, nada ocioso. Porque de lo que se trata es de hacer todo lo posible para comenzar a correr de nuevo. Y sí, ya estoy corriendo de nuevo. Cuatro sesiones suaves ya cumplidas, con un total de 36 kilómetros -el último con mi compañero de trabajo Juan Carlos Alvarez, por la zona del Pantano del Cubillas-. Y todo bien. Bastante bien. 
Y de cada sesión saco consecuencias positivas y nuevas experiencias; de cada lesión aprendo. Principalmente, intento aprender a no lesionarme de la misma manera; a afinar una vez más el oído para escuchar al cuerpo, a no forzar cuando se enciende alguna luz roja, a aprender a entrenar descansando, a admitir que el cuerpo -como las máquinas- se desgasta por el mero paso del tiempo y la actividad. Y un largo etcétera. Hay que cuidarse al máximo, hay que prevenir.
De esta nueva etapa, además, me he interesado por las nuevas tecnologías que la industria de la fisioterapia pone a nuestra disposición. Información que adquieres cuando acudes a las sesiones de fisioterapia, aparatos que ves, por los que preguntas y sobre los que descubres que también el mercado dispone de ellos para el ámbito doméstico.

A lo ya adquirido hace tiempo -electroestimulador Compex- como ya anuncié aquí, se une una lámpara infrarrojos, que debería de estar en la casa de todo corredor. La luz de infrarrojos ayuda a la recuperación; una vez aplicada la crioterapia inicial, el efecto calor de este tipo de foco, ayuda a acelerar la recuperación, toda vez que la alta temperatura provoca una penetración a través del tejido de la piel produciendo, entre otros muchos, un efecto anticontracturante y ayudando a bajar la inflamación si la hay; además produce un mayor y mejor crecimiento celular. 
Lógicamente, hay que tomar medidas en la aplicación local, pero todas las lámparas -que además son económicas- vienen con las instrucciones precisas para su uso, que es fácil y cómodo. 

También he adquirido algo más sofisticado y que está comenzando a penetrar en el ámbito doméstico. Se trata de un aparato de ultrasonidos portátil. Lo suelen usar mucho los fisios en las lesiones y es muy efectivo para una enorme cantidad de dolencias y lesiones, que van desde la ciática hasta las contracturas, pasando por la tendinitis, epicondolitis, lumbalgia, artrosis y un largo etcétera. También tiene programas relacionados con la estética y el cuidado de la piel, pertenecientes al moderno campo de la cavitación. Es un producto, aún, algo caro. Lógicamente bajará de precio cuando forme parte de la electrónica de consumo, pero eso no es probable que ocurra en mucho tiempo, como no está ocurriendo con los electroestimuladores de calidad.        
Lógicamente, no pretendo montar en mi domicilio una consultar de fisioterapia, entre otras cosas porque no poseo esa titulación y tengo otra profesión muy distinta; ni tan siquiera una de quiromasaje. Además, hay excelentes fisios que hacen su trabajo muy bien (¡qué haríamos sin ellos!). 
Tampoco sustituir las seguras sesiones de fisio que tendré que asumir en el futuro, nada de eso, pero sí procurar una prevención y una más pronta recuperación si vuelvo a lesionarme, que seguramente ocurrirá tarde o temprano. 
La tecnología doméstica al servicio del corredor aficionado. Y eso suena bien.    

UN VIAJE A PARÍS (I)

Existen ciudades que pueden ser contadas y otras que tiene que ser visitadas para poder contarse. Entre estas últimas está París.      No es...