21 abril 2013

BUSCANDO LA FORMA

Son ya más de 70 kilómetros los recorridos desde que comencé a correr tras la lesión, pero aún no está olvidada. Mal haríamos si ninguneáramos las lesiones, si las olvidáramos para siempre. Tampoco se trata de vivir obsesionados con la última lesión, pero es inevitable que cualquier escaramuza en la zona lesionada, cualquier tenue dolor, cualquier leve pinchazo provoca alarma. 
Ando buscando la forma a paso firme. Por lo pronto, la prudencia conlleva la progresividad en los entrenos, tanto en kilómetros como en ritmos. Nada de calidad -por supuesto-, ni rodajes rápidos, procurando mezclar terrenos asfaltados con otros terrenosos. Además, procuro calzarme las zapas menos gastadas por los kilómetros, para asegurar la mayor amortiguación posible (por supuesto, no creo en el run free o como se llame esa nueva tendencia, pero sí es muy beneficiosos andar descalzo por la playa o por el césped). 

Esta semana pasada ha sido escasa en rodajes. No más de 35 kilómetros repartidos en tres salidas, pero éstas han sido buenas en sensaciones y en progresividad. 
Comencé el pasado miércoles con un rodaje urbano de 10 kilómetros a un ritmo medio de 5'07'' el mil. Las sensaciones no fueron las mejores, porque aún encontraba las piernas algo cansadas por las rampas de Alhama, pero el objetivo era rodar y no otro.
El jueves con fuerte calor, Juan Carlos Álvarez -asiduo del Circuito provincial también- y yo llevamos a cabo un bonito rodaje, sumergiéndonos por la Vega más auténtica, pasando por terrenos de los municipios de Pinos Puente, Santa Fé y Fuente Vaqueros. Fue un rodaje tranquilo de 13,5 kilómetros y medio a un ritmo de 5'33'' el mil; y el sábado salí a rodar sólo 10,5 kilómetros a un ritmo algo más exigente -5' el mil- encontrando en este último rodaje mejores sensaciones que los dos rodajes anteriores. Por tanto, esa planificación progresiva va funcionando perfectamente. 
El próximo domingo habrá una prueba rápida: la del Padre Marcelino. Se trata de un circuito totalmente urbano de 10 kilómetros homologados y su perfil es llano. Por tanto, si consigo entrenar bien durante la semana y continuo con esa progresividad podría atreverme a rodar a 4'30'' el mil, aunque será la carrera la que me ponga -nos ponga- en nuestro sitio. Para tal fin tendría que rodar en alguno de los entrenos a 4'50'' el mil durante 12 kilómetros. Si lo consigo, no creo que tenga problemas para rodar el domingo al ritmo indicado.       
Y pensar que ese domingo tendrá que estar en el Maratón de Madrid, de acuerdo con mis planes de principios de año.

19 abril 2013

MÚSICA: DREAM THEATER (USA)

¿Quién no ha disfrutado con el metal progresivo de Dream Theater, una banda estadounidense que muchos consideramos de culto. Son unos intérpretes excelentes. Es más, yo diría que geniales. Porque pocas veces surge una banda con esa conjunción de talento en todos sus miembros (tanto los presentes como los antiguos). Llevar casi 30 años de forma ininterrumpida en la música ya de por sí es algo encomiable, pero seguir siendo fieles a su exquisito estilo es ya algo único. Un estilo que en algunos trabajos se ha decantado por el metal progresivo, pero en otros ha habido irrupciones de rock progresivo, existiendo entre ambos una tenue frontera, en ocasiones, imperceptible en estos virtuosos de la música.
Suelen utilizar guitarra eléctrica, bajo eléctrico, un portentoso teclado y una portentosa batería. Su actual vocalista, el canadiense James LaBrie, sólo se dedica en exclusiva a la voz y su estilo hace que se identifique inmediatamente a la banda. También hacen coros algunos de sus miembros. Es muy identificable la guitarra eléctrica y el bajo; pero es baldío aquí hablar de identificaciones porque todos y cada uno de los miembros de la banda aportan su estilo propio, que a la vez, en suma, generan ese inconfundible sonido de Dream Theater. Lamenté mucho no poder verles en directo cuando hace algunos años actuaron en Atarfe (Granada).
Hay que escucharles porque de hacerlo de manera frecuente -a mí me ocurrió- se convertirán en imprescindibles en tu discoteca. Aquí les vemos en un directo en 2006.

       
  

17 abril 2013

EL MUSEO DE CERA ACABARÁ CERRANDO

Acabará sucumbiendo a un ERE (que no se entere Griñán) a este ritmo. O eso o crear una sala de corrupción que puede ser algo muy molón y con mucho futuro. Imaginénse a los abueletes del Imserso de la provincia de Albacete en fila india dirigirse a ver al Urdanga, al otro yernísimo (el del patinete -¿cómo se llamaba?-) a la Pantoja, después de visitar a su paisano Iniesta, expectantes por ver al yerno listorro y a la tonadillera. 
No sería mala idea. Un amigo decía que hay que hacer negocio de lo que se tenga. Proponía cosas tan pintorescas como crear escenas ficticias de bandoleros en Andalucía -como con los western en Tabernas-, pero que los protagonistas fueran los políticos de la Junta. Algo así podría hacerse en el Museo de Cera, propongo. 
Porque no cabe duda que alguna sombra de preocupación ya estará rondando entre los trabajadores del mediático museo madrileño, que observan con inquietud cómo cada día hay más huecos en las salas, siendo lo preocupante que no se trata de huecos que pasen desapercibidos, todo lo contrario. 
También sería buena idea - si no prospera la sala de la corrupción, que así la vamos a bautizar-, crear una especie de sala de los sablazos al dinero público, con explicaciones muy precisas y documentadas acerca de la pericia de la versión humana de los muñecos de cera a la hora de extorsionar, blanquear, robar, mangonear o enviar fondos a paraísos fiscales. Eso quedaría la mar de didáctico. 
Por tanto, trabajadores del Museo de Cera, si por un casual leéis ésto, haced el favor de plagiarme la idea e ir pensando en lo que escribo, que a este ritmo quedará Iniesta, Casillas y pocos más. Y gracias a que a los futbolistas se les deja en paz, que para eso son nuestros héroes campeones del mundo mundial.   

16 abril 2013

SOBRE REDES SOCIALES Y LA AFICIÓN DE ESCRIBIR

Dicen las afiladas lenguas cibernéticas que a quienes nos gusta escribir creamos un blog; y al que le gusta menos, se conforma con tuitear. Sin embargo, mucha gente -entre los que me incluyo- posee un blog y una cuenta de Twitter. Pero para quien esto susbribe no hay color: prefiero el blog. 
A pesar de que escribir en esta pantalla en blanco (vosotros veis un texto más o menos largo; más o menos coñazo; más o menos interesante, pero quienes escribimos un blog nos enfrentamos a una pantalla en blanco casi a diario) y en ocasiones no tenemos ni idea qué contar; es más, hay que hacer filigranas para no repetirse. Pero nos gusta escribir, me gusta escribir. A pesar de que en ocasiones no tenga ni idea de quién hay al otro lado; es más, escribir con la casi seguridad de que al otro lado, en muchas ocasiones, no hay nadie. Pero escribir -qué duda cabe- es un ejercicio individual y siempre es mejor escribir sin considerar quién te pueda estar leyendo. Esa es la humildad inherente a este ejercicio, algo muy similar a lo que supone correr. Cuando escribes cabe la posibilidad que nadie te lea; y cuando corres existe la casi absoluta certeza que no ganarás nada y, sin embargo, subes rampas, bajas cuestas,  atraviesas caminos y carreteras, a pesar de tener la certeza de tu mismidad y el cierto onanismo que comporta devorar kilómetros en soledad.  
Pero volviendo a lo de las redes sociales. Hace no mucho creé una cuenta de Twitter (básicamente para comunicar lo que escribo en el blog) y enseguida comprendí que este tipo de cuentas son almas de doble filo. Por lo pronto, son grandes devoradoras del tiempo si no utilizas bien la cabeza. Y eso ocurre, porque la obsesión de tener seguidores puede conllevar que tu sigas a gente que jamás vas a leer. E, igualmente, ellos te siguen a pesar de que jamás te van a leer. En cambio, hay gente muy mediática -futbolistas, cantantes, famosos en general-, que les cuesta escribir los 140 caracteres que creo te ofrecen y, sin embargo, tienen millones de seguidores. No por lo que digan sino por lo que representan, por su imagen catódica y mediática. Por tanto, Twitter, Facebook o tras redes sociales similares, simbolizan muy bien lo frívola que es y lo enferma que está nuestra sociedad: no interesa leer ni la calidad o interés de lo que se diga, sino quién lo diga (estoy seguro que si Sergio Ramos -uno de los peloteros más activos y con más seguidores- cuenta que acaba de salir del baño, eso se convierte en un fenómeno social; así somos). Por tanto, cada cual tiene que utilizar estas herramientas de acuerdo con sus intereses y su personalidad. A mí me interesa de Twitter -por ejemplo-, no que me sigan (que seguramente lo harían y la mayoría no me leerán) o yo seguir a otros (a los que no leeré), sino descubrir páginas, blog y gente que escribe y hace cosas interesantes. Por ejemplo, me interesa mucho la tecnología de las comunicaciones y sigo blogs y páginas sobre estos asuntos; e, igualmente, me interesa la cultura y los libros, el sonido y la música, las cosas relacionadas con el correr, la nutrición, y un largo etcétera  y hago lo propio. Porque resulta que Twitter es muy útil como herramienta para descubrir cosas interesantes, que no es posible hacerlo meramente navegando, porque te pierdes.  
Por su parte, escribir un blog es otra cosa muy distinta. Insisto en que escribes porque te gusta hacerlo pero, en ocasiones -las que más- te sientes atravesando el desierto y la soledad es absoluta. Escribes entradas y el contador de comentarios se queda a cero y le salen telarañas; sabes que alguien te lee por ahí, pero tampoco estás completamente seguro, a pesar de que el contador de visitas insista en que sí.  Pero aún así es algo interesante porque conlleva la misma  soledad a escribir un relato, una novela o un artículo periodístico, cosas que publicas y que, realmente, no sabes el número de lectores que tendrán. Y suerte que Granada no es una ciudad excesivamente grande y siempre obtienes un reflejo de lo que has escrito, por una vía o por otra. Porque no hay que negar que toda persona que escribe, a pesar de que lo haga en soledad y sea una tarea solitaria, necesita saber que tiene lectores ¿Algo de vanidad? Sí, sin duda.     

14 abril 2013

XXIV PREMIO DE FONDO 'COMARCA DE ALHAMA' (14/4/2013)

Alhama de Granada, es un pueblo alto. Está a 895 metros sobre el nivel del mar; es decir, que es 157 metros más elevada que Granada. Y alta es su iglesia mayor, de estilo renacentista con decoración barroca, del siglo XVI. Pero aún así, la serpiente multicolor -que es un argot prestado del ciclismo- en que se han convertido las carreras populares, puede ver el tejado de esa iglesia. No me estoy refiriendo en estas primeras líneas a latitudes ni alturas, ni tampoco a monumentos, estoy intentando situar al lector -sobre todo al ajeno- sobre las fuertes subidas a las que se enfrenta el corredor en este histórico y vistoso pueblo del Temple granadino. 
Además, Alhama está lejos; a nadie le coge cerca. Es un pueblo estratégicamente situado por las distintas civilizaciones que lo han ido poblando y, aún hoy, en pleno siglo XXI, los accesos son malos. No me estoy refiriendo a su situación histórica y geográfica sino al importante esfuerzo que ha de hacer cada corredor para acudir allí, con independencia del rincón de Granada de donde proceda (o de la provincia de Málaga, porque a muchos de por allí he visto, ya que es tierra fronteriza con esta provincia; de otras provincias ya ni hablamos). 
Esfuerzo para acudir y esfuerzo para subir. Es el precio por enfriar esta pasión desenfrenada por correr y participar en pruebas de competición. 
Recuerdo que hubo años en los que acudíamos a Alhama unos muy pocos cientos, ahora son muchos los cientos. En esos años, se contemplaba un delgadísima línea que subía a paso continuo por esas rampas; ahora es una serpiente multicolor, como antes decía. Es la victoria del cuerpo sobre la materia; el ejercicio versus colesterol; el triunfo de las masas sobre la minoría. No obstante, jamás he visto tanta gente andando por esas rampas. Es lo que tiene: el deporte popular llega a todos -debe llegar a todos-, pero también se paga.

Y yo también he vuelto. Siempre vuelvo en esta carrera.
La cosa viene funcionando más o menos así: corro la primera de Armilla, me lesiono y ya no vuelvo hasta Alhama. Es un estricto código que últimamente está llevando a cabo mi organismo, que ya no suele volver a llamar la atención hasta comienzos del siguiente año. Si así lo quiere él, así lo admito yo. 
Pero reconozco que correr con prevención tiene sus ventajas. Te pones en el furgón de cola y no te preocupas de nada más que de seguir la estela de la serpiente. Si tus piernas te lo piden, las estiras y las alzas más; si no te lo piden te dejas llevar. Así de fácil.
Ese correr con prevención te impide sufrir menos también, porque en dos meses de parón se gana en prevención pero no se pierde mucha forma anaeróbica. Y no niego que así da gusto correr. Sufres lo justo; y lo justo es sufrir poco cuando estás recién recuperado. 
Además, es la mejor forma de reconciliarte con la carretera y con las pruebas populares. La mejor forma de saborear el suave elixir del deporte popular. Poder decir cuando has acabado tu prueba: he estado ahí y he disfrutado. La mejor forma de encontrar las sensaciones y las ganas para la próxima. 
Por cierto, feliz ocurrencia de ofrecer una camiseta técnica (excelente, por cierto). Si no me equivoco es la primera ocasión en que se desechan aquellas ásperas camisetas de algodón. Lo siento por el polvo de los muebles.

ACTUALIZACIÓN

http://paper.li/donzurreon/1355067670#!sports

13 abril 2013

ALHAMA, DE NUEVO


El año pasado la prueba de Alhama se celebró en idénticas fechas a las de este año, pero hizo un frío bestial y había llovido profusamente los días anteriores -no recuerdo si lo hizo durante el recorrido; creo que no-. Sin embargo, en la edición de este año, si el tiempo no lo remedia, las temibles rampas habrán de ser subidas con calor. Para muchos corredores es mejor así, pero yo lo tengo claro: prefiero el frío y la lluvia, aunque no el viento.

Y el destino ha querido que vuelva a recomenzar de nuevo en esta prueba. El año pasado fue exactamente igual: corrí la primera prueba de Armilla y ya no me reincorporé hasta la prueba de Alhama. Como ocurría en 'Atrapado en el tiempo', se vuelve a repetir la historia. 
Lo importante, sin embargo, es poder concluir la prueba con buenas sensaciones y sin problemas musculares a un ritmo lo más suave posible, saliendo en el furgón de cola, como es apreciable en la fotografía que el año pasado tuvo a bien hacernos Paqui a Roberto y a un servidor.
Pues nada, si alguien quiere 'torturarse' con la película de la carrera del año anterior, no tiene más que pinchar aquí 
Por lo demás, suerte a quien vaya a correr en tan bonita tierra. Nos vemos en la ruta.

11 abril 2013

REGRESO A LOS CAMINOS (OTRA VEZ)


Regresar a los caminos y retirarse. Dos caras de una misma moneda. El Yin y el Yang. Una parte importante de la 'Biblia' del corredor. 
Casi dos meses refugiado, esperando a que cierre la microrotura fibrilar en el gemelo interno izquierdo. Dos meses de paciencia hagiográfica, alternando las largas caminatas, con la MTB, las sesiones de elongamiento, las sesiones de abdominales, las sesiones de fisio. O sea, nada ocioso. Porque de lo que se trata es de hacer todo lo posible para comenzar a correr de nuevo. Y sí, ya estoy corriendo de nuevo. Cuatro sesiones suaves ya cumplidas, con un total de 36 kilómetros -el último con mi compañero de trabajo Juan Carlos Alvarez, por la zona del Pantano del Cubillas-. Y todo bien. Bastante bien. 
Y de cada sesión saco consecuencias positivas y nuevas experiencias; de cada lesión aprendo. Principalmente, intento aprender a no lesionarme de la misma manera; a afinar una vez más el oído para escuchar al cuerpo, a no forzar cuando se enciende alguna luz roja, a aprender a entrenar descansando, a admitir que el cuerpo -como las máquinas- se desgasta por el mero paso del tiempo y la actividad. Y un largo etcétera. Hay que cuidarse al máximo, hay que prevenir.
De esta nueva etapa, además, me he interesado por las nuevas tecnologías que la industria de la fisioterapia pone a nuestra disposición. Información que adquieres cuando acudes a las sesiones de fisioterapia, aparatos que ves, por los que preguntas y sobre los que descubres que también el mercado dispone de ellos para el ámbito doméstico.

A lo ya adquirido hace tiempo -electroestimulador Compex- como ya anuncié aquí, se une una lámpara infrarrojos, que debería de estar en la casa de todo corredor. La luz de infrarrojos ayuda a la recuperación; una vez aplicada la crioterapia inicial, el efecto calor de este tipo de foco, ayuda a acelerar la recuperación, toda vez que la alta temperatura provoca una penetración a través del tejido de la piel produciendo, entre otros muchos, un efecto anticontracturante y ayudando a bajar la inflamación si la hay; además produce un mayor y mejor crecimiento celular. 
Lógicamente, hay que tomar medidas en la aplicación local, pero todas las lámparas -que además son económicas- vienen con las instrucciones precisas para su uso, que es fácil y cómodo. 

También he adquirido algo más sofisticado y que está comenzando a penetrar en el ámbito doméstico. Se trata de un aparato de ultrasonidos portátil. Lo suelen usar mucho los fisios en las lesiones y es muy efectivo para una enorme cantidad de dolencias y lesiones, que van desde la ciática hasta las contracturas, pasando por la tendinitis, epicondolitis, lumbalgia, artrosis y un largo etcétera. También tiene programas relacionados con la estética y el cuidado de la piel, pertenecientes al moderno campo de la cavitación. Es un producto, aún, algo caro. Lógicamente bajará de precio cuando forme parte de la electrónica de consumo, pero eso no es probable que ocurra en mucho tiempo, como no está ocurriendo con los electroestimuladores de calidad.        
Lógicamente, no pretendo montar en mi domicilio una consultar de fisioterapia, entre otras cosas porque no poseo esa titulación y tengo otra profesión muy distinta; ni tan siquiera una de quiromasaje. Además, hay excelentes fisios que hacen su trabajo muy bien (¡qué haríamos sin ellos!). 
Tampoco sustituir las seguras sesiones de fisio que tendré que asumir en el futuro, nada de eso, pero sí procurar una prevención y una más pronta recuperación si vuelvo a lesionarme, que seguramente ocurrirá tarde o temprano. 
La tecnología doméstica al servicio del corredor aficionado. Y eso suena bien.    

09 abril 2013

SEGUIMOS CIEGOS ANTE LA MONARQUÍA ESPAÑOLA.

Cuando yo comencé a escribir -en otros lugares donde publico o he publicado no lo he tenido tan fácil- aquí críticamente sobre la Casa Real española, muchos entendieron que estaba obsesionado o que imaginaba cosas o, incluso, que era un republicano convencido. Años después se comienzan a cumplir esas cosas que sólo unos pocos sospechábamos que pasarían. Cosas que estaban ahí a la vista de todos, pero que nadie quería ver. Unos porque no estaban los suficientemente informados o no querían informarse; otros porque le habían inyectado litros de glucemia a base de ver programas del corazón;  otros porque consideraban que la Monarquía representaba la estabilidad sin saber bien lo que decían; otros porque habían vivido la guerra y consideraban que habría que olvidar todo lo que sonara a República; y los que más, porque no han tenido el suficientemente sentido crítico ante esta familia que ha hecho lo que le ha dado en gana, auspiciados por el vergonzoso pacto de silencio de los medios de comunicación, el compadreo político, los silenciosos y discretos y los complacientes, muchos de los cuáles vivían, o creían vivir del prestigio de la Corona en España y fuera de nuestras fronteras. En suma, unos en menor medida que otros, todos somos responsables. Todos hemos alimentado al monstruo y ahora muchos salen con antorchas incendiarias en la noche oscura.
Hemos mirado hacia otro lado y ahora nos rasgamos las vestiduras y aludimos a crisis institucional, crisis de Estado o cosas por el estilo. Hubiera bastado con más seriedad, más denuncia, más crítica, más transparencia institucional y económica; y sobre todo más democracia. Pero hubiera sido mucho mejor que con anterioridad a la aprobación de la Constitución de 1978 hubiéramos podido decidir sobre qué forma política de Estado queríamos y no que la monarquía entrara en el paquete institucional sabiendo, como sabíamos, que había sido la decisión de Franco y no la del pueblo español que pretendía ser democrático. 
Pero nada de eso ha habido en este decadente y podrido país porque es costumbre nacional, desde siempre, que las cosas lleguen hasta niveles insostenibles y, finalmente, darnos el batacazo para comenzar de nuevo. 
Sin embargo, seguimos sin escarmentar. Hay más datos que nunca sobre a qué juego han estado jugando los Borbones desde siempre y seguimos dando palos de ciegos. Hemos tenido que soportar los múltiples devaneos del Rey a todos los niveles, los negocios de su yerno -que supuestamente podrían apuntar a la misma Casa Real, al tiempo-, la imputación de la Infanta, el parasitismo de la familia del Rey y de la Reina y, últimamente, el patrimonio del monarca. Pero nada de eso nos saca de nuestra ceguera. 
El país se desangra económicamente, el futuro de jóvenes y no tan jóvenes se escapa y aún soportamos que toda esta gente siga siendo mantenida con nuestros impuestos, apoyados por los políticos y sin dar muestras de la menor autocrítica, austeridad o transparencia. Eso sólo pasa en nuestro país y, en verdad, es probable que nos lo merezcamos por crédulos y sumisos.          
   

08 abril 2013

MANUAL DEL BUEN JEFE Y DEL BUEN SUBORDINADO (IDEAL 8/4/2013)


¿Quien no ha sufrido o ha odiado la relación laboral en la que se encuentra? Un mundo complejo. Turbio a veces, en realidad, como bien dice mi Alter, Jesús Lens, en un tuiter: 'Cuando el ámbito laboral se convierte en una jungla..'. De todo eso y de mucho más escribo en este artículo que me publica hoy el diario Ideal de Granada, con edición en la Costa, Almería y Jaén. Aquí lo tenéis reproducido, por si no habéis podido leerlo en formato papel.  

Y lo mejor de todo es que este artículo me lo ha inspirado un mal jefe del que me han hablado o vivido, nunca se sabe. 

MANUAL DEL BUEN JEFE Y DEL BUEN SUBORDINADO

   El mundo laboral está lleno de malos jefes y malos subordinados. De malos profesionales en definitiva. Pero el mundo es imperfecto y en ocasiones los papeles están invertidos: donde dice jefe debería decir subordinado y viceversa. O Sencillamente no debe decir nada.
    El manual del buen jefe y del buen subordinado aún no está escrito,  pero para mí tengo que jamás se escribirá porque es complejo, cambiante y, en ocasiones, inasible. Ni siquiera con pinzas.
   Busquemos en el interior de nuestras experiencias y en las de otros y tan sólo encontraremos despropósitos. Jefes que pierden los papeles y transportan al despacho sus fobias, frustraciones, carencias sexuales, miedos e inseguridades personales, convirtiendo el ambiente laboral en una torticera consulta psiquiátrica experimental. O sea, poder mal entendido. En el otro extremo, subordinados aterrados ante el cotidiano espectáculo del juego de sombras y conspiraciones en que se ha convertido la oficina o el centro de trabajo. O sea, sumisión enfermiza.
            Luego, ¿de qué cualidades carecen ambas partes para que se produzca tanto despropósito? Si lo supiera, comenzaría a escribir mañana mismo ese manual pendiente, pero mucho me temo que existe una grave carencia de cualidades innatas y adquiridas porque no todo el mundo vale para las mismas cosas, aunque no lo sepa. Y en la historia de la humanidad, como en la Ley de Murphy, todo suele salir justo al revés de lo previsto, si es que algo positivo brota de ese cúmulo de interacciones fallidas que siempre han sido las relaciones sociales, y no digamos las laborales.
            Ocurre que en la amplia amalgama de las relaciones laborales han de encajar muchas piezas para que, en un espacio de tiempo amplio y en un ámbito físico concreto, todo salga a pedir de boca. Que las frustraciones de los sujetos no se confundan con el rendimiento laboral, que la libido de ambos sexos no enturbie el trato profesional, que las ambiciones legítimas no se mezclen con la ilegítimas, que la jerarquía no se equipare con el respeto humano, que la valoración de la pericia y el rendimiento que posee el jefe sobre el subordinado -o viceversa- no se inmiscuya en la valoración personal del otro, que las limitaciones de unos no se conviertan en el tormento de otros. Muchos requisitos necesarios, me temo, para que el engranaje de las relaciones laborales ruede por vías no chirriantes. Casi como hablar de la hipótesis de la existencia de un mundo perfecto.
            Y qué duda cabe que detrás de todas esas disfunciones se encuentran las bases de más de una teoría que sirva para explicar todas las clases de acoso laboral y sus derivaciones, algo tan atávico como la existencia de la humanidad misma.      

@jafloresvera

07 abril 2013

CINE: LA VIDA DE PI (USA, 2012)

'La vida de Pi', es de ese tipo de películas que enamoran. Lo onírico y lo fantástico, bien tejidos, a la fuerza tienen que hacerlo. Muchas de sus imágenes nacieron para el 3D -quien la ha visto en ese formato habla maravillas-, pero en 2D la grandeza visual también es enorme. 
'La vida de Pi' pertenece a ese tipo de películas mágicas, tipo 'Big Fish' o 'Fotografiando Hadas' -excelentes ambas-, si bien la suave y sutil mano de Ange Lee hace de ésta algo distinto. De hecho nadie ha tratado la homosexualidad con tanto estilo e inteligencia que él (Brokeback Mountain), y cuenta con la experiencia de adaptar al cine la que es, probablemente, la mejor novela de Jane Austen (Sentido y Sensibilidad).  
Y es que en 'La vida de Pi' todo es mágico pero nada pertenece a otro mundo. No se puede negar que las situaciones que narra la película no pertenecen a la normalidad ordinaria, pero no son en absoluto paranormales ni de otro mundo. Situaciones que sólo la imaginación puede imaginar, pero perfectamente posibles, en realidad. Y esa labor imaginativa se debe a la novela de Yann Martel, el escritor canadiense, aunque nacido -por gajes del destino- en Salamanca. 
En la última película de Lee hay mucho efecto visual, pero en absoluto es empalagoso. Sin duda, que a los productores la influencia del 3D les ha influido mucho. No obstante, por lo que expresa y cuenta la película, necesariamente ha de haber una buena fotografía, pero no, no es buena: es excelente. Algunas escenas pertenecen a otra dimensión visual. De ahí que se aconseje verla en alta definición con la imagen y el sonido en su mejor vertiente. Que a nadie se le ocurra verla en una de esas copias chusqueras que venden o se bajan de Internet; y por supuesto, mucho menos en esa formula horrible y dantesca de visión on-line en la red. 
No, esta película merece ser vista con los mejores medios técnicos que nos ofrezca la tecnología visual y sonora. Entonces, sólo de esa forma, nadie se arrepentirá de haberla visto porque es magnífica.   

06 abril 2013

MÚSICA: DRACONIAN (SUECIA)

Draconian es veterana banda sueca, que surge en 1994 al calor de la rama metálica Gótica y que a lo largo de su carrera han penetrado en el Death y en el Doom, utilizando voces masculinas y femeninas. Su estética y estilo -en ocasiones, no siempre- es similar a sus paisanos Therion, pero también existen en ambas bandas muchas diferencias y como  suele ser habitual en casi todas las bandas suecas ha cambiado de miembros en más de una ocasión. 
Utilizan por lo general dos guitarras, bajo, batería, teclados y lo consabida voz femenina  y voces guturales masculinas; su proyección ha ido en aumento desde su nacimiento, hace ya casi 20 años.  
Les descubrí hace poco y desde el principio me ha parecido una banda excelente, portentosa. Poseen un dinamismo musical proverbial. Si os gusta Therion os puede gustar Draconian, sin que olvidemos su estilo más duro, su Death y, por tanto, sus voces guturales masculinas frecuentes, aspectos éstos que le conectan más con 'Theatre  of Tragedy', vecinos noruegos. Aquí les vemos en un concierto en Rivne -Ucrania-, antes de que su anterior voz femenina, Lisa Johansson, dejara la banda.


UN VIAJE A PARÍS (I)

Existen ciudades que pueden ser contadas y otras que tiene que ser visitadas para poder contarse. Entre estas últimas está París.      No es...