30 abril 2011

LOS BLOGS


Esta tarde mientras hacía mi ruta de 16 kms. por una verdísima Vega, bajo un buen aguacero, en algún momento de la ruta, en uno de esos momentos que experimentamos los corredores en el que las piernas van sueltas y sin esfuerzo, la respiración tranquila y la mente despierta, pensaba en el papel de los blogs, que es un fenómeno que se inició no hace muchos años y que está captando cada vez más lectores y asiduos escritores. ¿Pero de qué material están hechos los blogs para que encuentren tanta aceptación? Sin lugar a dudas, el blog, en su esencia, es un experimento personal pero jamás puede caer en la tentación de ser personalista.
Escuchaba hace unos días en televisión que uno de los más excelsos blogueros fue alguien que jamás supo de la existencia de los blog ni de nada que tenga que ver con la informática. Me refiero a Josep Plá, ese original escritor catalán que escribió "El cuaderno gris". Precisamente en este obra -su obra cumbre- Plá, escribió una especie de diario minucioso, utilizando una deliciosa prosa que bien podría haber sido el precursor de los blog. Escribió sus vivencias personales, sus opiniones, sus ideas, su visión del mundo, pero jamás cometió el desatino de escribir sobre personalismos que probablemente no interesaran a nadie. Esa es, en mi opinión, la esencia de los blog.
Los blogueros, en más ocasiones de las aconsejadas, confundimos escribir en primera persona con escribir de la propia persona. Pero no es exactamente lo mismo. Es más, podría ser diametralmente opuesto. Lógicamente, en una bitácora personal uno describe el mundo -o algún aspecto del mundo- tal y como lo ve y lo vive, pero no ha de describir su vida porque eso sería otra cosa y seguramente no interesaría a nadie.
Por ejemplo, yo en mi blog he hablado de amigos y he comentado algunas circunstancias: si hemos corrido, básicamente, porque este blog se dedica en gran parte a este deporte; pero jamás se me ocurriría escribir -por ejemplo a mi amigos Paco o Emilio- algo referente a mis relaciones más personales con estos amigos, porque para eso está el teléfono, el correo electrónico o, sencillamente, los encuentros personales. Es así como lo entiendo. Todo lo demás me parece exhibicionismo o despropósito.
En esencia, lo que escribo en el blog lo escribo porque considero que está bien. Si corro y disfruto lo cuento porque me parece una experiencia exportable; si leo un libro y me gusta, lo comunico porque la calidad literaria debe ser reproducida; si valoro una película opino sobre ella y será tan sólo una opinión personal; si escribo un artículo y lo publico en el periódico lo trasladó también a la bitácora porque forma parte de mi creación y pensamiento. Son vivencias, ideas, impresiones, opiniones que experimento, que lanzo al espacio virtual, pero nada más. No tienen más importancia que la tiene. De hecho, los blogueros somos millones y es imposible leer a millones; de ahí que la mejor manera de no mirarnos el ombligo es alejarse del exhibicionismo y la desnudez personal. Para eso está la prensa rosa, que ya tiene sus acólitos. La vida de cada persona es lo más privado que existe y violentar esa privaticidad lo más pernicioso.
Además, pretender pensar que porque te lean cien o doscientas personas a diario, tus opiniones son dogma de fe me parece un grave error y caer en esa autocomplacencia es el mayor de los defectos del bloguero y la mejor forma de claudicar. Un bloguero no llega ni a ser una micra de polvo en el universo virtual.
Cada bloguero ha de tener un cometido, un rol. Cada uno tiene que saber y responsabilizarse de lo que escribe y saber por qué lo hace.
En mi caso concreto -que es el que más conozco- no sé exactamente si lo que escribo goza de mayor o menor aceptación, a pesar de que los comentarios, cuando los hay, te puedan dar una idea, pero si sé porque escribo un blog. Muy sencillo: me apasiona escribir. Tengo hábito de escribir. Nada más.

3 comentarios:

  1. ¿ Por qué escribimos ? ¿ Para qué escribimos ?

    Lo hacemos porque somos seres, humanos y vivimos en sociedad.
    Para buscar, conocer, conocernos, encontrar y encontrarnos.

    Salud.

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  2. Anónimo1/5/11, 8:13

    Yo no eligo escribir porque es una necesidad, en cambio los seguidores son libres para leerme o no. Escribir va en mi propia esencia y seguiría escribiendo aunque no tuviera seguidores. En cambio me reconozco que soy seguidor de otros y en esa relación si me siento esencial. Es importante para mí saber qué hacen o que cosas pasan a otros corredores, me importan con sinceridad.
    Me gusta lo que dices.

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  3. Y qué mejor que una correcta utilización que nos ofrece Internet. Saludos Toni.

    De acuerdo con lo que comentas RA. Y, por supuesto, comentas en otros blog es nuestra obligación moral.
    Gracias por pasar por aquí.
    Saludos.

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Sin tu comentario, todo esto tiene mucho menos sentido. Es cómo escribir en el desierto.

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