La inusual historia que se narra en esta novela comienza con un misterioso mensaje recibido en su teléfono móvil por el protagonista, Miguel Ángel Gonzálbez, en la Nochevieja de 2019, vísperas de Año Nuevo de 2020... Un mensaje con un texto extraño, expresado con un lenguaje que parece de otro tiempo; de manera muy distinta a como se suelen enviar los mensajes en el día de hoy, y que retrotraía a cien años el cómputo del tiempo. Miguel Ángel Gonzábez podría haber pasado página entendiendo que se trataba de un error y haberlo ignorado, pero el mensaje se instaló en su mente casi de manera obsesiva, como si algo le dijera que debía de investigar la procedencia del mismo, que desconocía. E hizo lo que solemos hacer la mayoría cuando recibimos un mensaje de un número desconocido: llamar a ese número.
La llamada, lejos de aclararle el asunto, lo confunde y le intriga, sobre todo, porque tras varios intentos fallidos le responde una funeraria de un perdido pueblo de Toledo, que desconocía que existiera... Es a partir de entonces cuando comienza para el protagonista un viaje sin precedentes.
A través de este viaje, el protagonista explora no solo las extrañas circunstancias que lo rodean, sino también sus propios miedos, recuerdos y deseos ocultos.
José Antonio Flores Vera nos brinda una novela que combina elementos de lo sobrenatural con una profunda reflexión sobre el paso del tiempo y los lazos entre el pasado y el presente.
Siempre me ha atraído todo en referencia a este fenómeno tan atractivo y que tu, lo traslada muy bien a tus cuentos que has publicado. Me gusta más llamarles cuentos, cómo los de Edgar Allan Poe que tantas satisfacción me dan. Tu nuevo libro, promete además por ése culto al cuerpo, a ése miedo a envejecer. Mi opinión de ésto es, que mejor ir "aclimatandome" y acoplarme al inevitable deterioro de la piel en formas de arrugas y al cuerpo, a sus crujidos que luchar contra ello.
ResponderEliminarSin duda, nunca dejas de sorprenderme con tus libros y artículos. Un abrazo