25 abril 2009

CURRÍCULUM DE POLÍTICOS


Seguimos hablando en clave política -por más que me guste escribir de otras cosas-. 
Siempre me ha resultado curiosa la habilidad con la que redactan los currículum de los políticos los responsables de prensa de partidos y gobiernos. Son capaces de crear verdaderos historiales laborales y académicos de la nada más absoluta. Adornando, dejando verdades a medias (o mentiras a medias), utilizando denominaciones a cargos, títulos académicos y otros supuestos méritos, que hacen que, nosotros, el resto de los mortales nos sintamos energúmenos mediocres. Pero no es patrimonio sólo del mundo político, también es muy usada esa retórica en ensalzamientos de méritos de personajillos públicos de poca o mucha monta.
En estos días he tenido oportunidad de leer en los periódicos algunos currículum de políticos, con ocasión de nuevos nombramientos en el gobierno central y en el andaluz y he observado que  se recurre mucho una frase hecha cuando se trata de ensalzar a un político que no ha concluido licenciatura universitaria alguna. La frase en cuestión es: estudios de Derecho, de Medicina, de Ciencias Políticas, etc. De manera que queda el ensalzado como un verdadero lumbrera, llegando a ser más atractiva la frase "estudios de", que "Licenciatura en". Lo leía en el caso de "Pepiño" Blanco, nuevo Ministro de Fomento.
Igualmente existe una mecánica basada en la media verdad, o incluso la utilización de denominaciones técnicas a algún mérito que en el día a día casi pasa desapercibido y lo posee cualquier hijo de vecino. De hecho, muchos currículum se basan en cargos que se han tenido como político, representando a tu partido, pero que obtienen denominaciones del tipo "Comisión Asesora.." o "Grupo de estudio..", y claro, el hombre o la mujer de la calle inmediatamente asumen que estamos ante un o una lumbrera. Acordémonos, por ejemplo, de aquel famoso Roldán que alumbraba un currículum impresionante, demostrándose que nada era cierto.
Otros méritos, aunque más objetivos, son debidos en gran parte a esa militancia política. De hecho, las Diputaciones Provinciales, por poner un ejemplo, siempre han sido el refugio de ex-concejales, ex-alcaldes o ex diversos de los entes locales, ex- cargos de la vida política local, que han ocupado plazas funcionariales o laborales que están previstas en la Relación de Puestos de Trabajo del organismo respectivo, en la mayoría de las ocasiones optando a concursos o concursos-oposición, con todas las ventajas a favor del aspirante, que ya ocupaba la plaza interinamente.
No obstante, no quisiera con estas palabras enturbiar los verdaderos méritos de hombres y mujeres que llegan a la política con un enorme prestigio profesional y académico, o bien, ese enorme prestigio lo han conseguido al margen de su militancia política, aunque mucho me temo que en nuestro país, estos últimos casos son menos numerosos.       

8 comentarios:

  1. Algunos saben muy bien maquillar y ensalzar a los que no llegaron. Es una forma políticamente correcta de decir lo buenos que son sus cargos.

    Menos mal que sí que hay gente realmente preparada en cualquier partido. En caso contrario, ¡adónde iríamos a parar!

    ResponderEliminar
  2. Tu lo has dicho Greg, maquillar lo hacen de maravilla. Existe mucho cuento, pero también hay casos honrosos, por supuesto. Como bien dices, qué sería de nosotros si no?

    ResponderEliminar
  3. José Antonio:

    Lo importante no es si tienen "estudios de" (pendientes o ya finalizados), ya que esto no es garantía de absolutamente nada. Y mucho menos en un cargo político.
    Lo más importante es la preparación y el compromiso personal de cada cual.

    No creo que para ser un buen ministro de Sanidad haya que ser el mejor médico. Ni tampoco creo que el mejor ministro de Justicia tenga que ser un gran juez o un mejor fiscal. Por ejemplo.
    Ahí tenemos ejemplos en Defensa, en donde fueron y han sido ministros quienes ni siquiera conocían las graduaciones militares, como Serra o Chacón.

    Citas a Roldán, y a mí si que me parece que fue un auténtico lumbreras. Llegó a engañar a casi todo el mundo y se enriqueció como nadie. Su defecto: se volvió muy codicioso, y por ello fue delatado por algunos de sus coroneles y generales que le guardaban las espaldas. ¿ Cómo es posible que Roldán, un Director de la Guardia Civil que estaba siempre rodeado de multitud de personas, fuera procesado por tantos desfalcos y apropiaciones indebidas, mientras que sus adláteres se marcharon de rositas ?

    Estaremos pendientes de Pepiño. ¿ Será buen ministro de Fomento?
    Recordaré que Álvarez Cascos era Ingeniero de Caminos y ha sido el peor ministro de Fomento que he conocido en democracia.

    Saludos republicanos. Toni Sagrel.

    ResponderEliminar
  4. Ayer estuve cerca de Alhama, subí El Maroma con unos compañeros del curso. Disfruté plenamente de esa ascensión, fueron muchas horas de subida y menos de bajada. Me bino bien como fortalecimiento de piernas. Desde allí se veía Alhama y me acordé de esa carrera que tu ya habrás disputado, ya nos contarás.

    Respecto a esos gruesos curriculum de politiquillo, poco que añadir. Estoy de acuerdo contigo y con los comentarios de los amigos...Un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Apreciado amigo Toni. Tampoco considero que un título bajo el brazo sea sinónimo de buen ministro, consejero u otras yerbas. Sin embargo, indirectamente, me refería a la importancia que sí le dan a ese asunto politicos y partidos, y la prueba de ello es que inflan curruculum cuando no tendría que ser así, en absoluto, ya que como bien dices un político no necesita necesariamente padecer titulitis, sino unas ideas claras y un compromiso. Por ejemplo, el caso de Lula, para mí, un buen presidente que se formó en el mundo laboral y sindical. Saludos amigo.

    Paco, muy cerca estuviste de Alhama. Sin pensarlo te tienes que venir el año que viene a correr a esta bonita tierra.
    Hoy me siento gratificado por mi carrera y no siempre es así.
    Lamentable tener que sufrir a determinados políticos que, ademas, se adornan de inexistentes ínfulas. Saludos.

    ResponderEliminar
  6. Y esa Alhama? como se ha dado? seguro que la habrás disfrutado! saludos

    ResponderEliminar
  7. Una licenciatura es sinónimo de haber termiando una carrera. O sea, de esfuerzo, de aprobar exámenes y de estudiar. No de ser más listo o más nada, pero, cuando menos, de haber invertido esfuerzo en sacarla.

    Con haberse matriculado en Derecho y aprobar dos asignaturas de primero, ya puedes poner lo de "Estudios en Derecho".

    En fin. Los maquilladores, como dices, de Oscar. Algunos.

    ResponderEliminar
  8. Paco, colgaré en un rato una visión particular de Alhama. A ver qué te parece. Saludos.

    Jesús, cuando lo más sensato para el político, el pueblo, el partido es ser congruente con lo que tiene conseguido o no el candidato. Al final, como bien dices, una licenciatura es sólo eso, y total, para lo algunos-as la aprovechan...
    He conocido a mucha gente sin títulos y mucho talento y viceversa.

    ResponderEliminar

Sin tu comentario, todo esto tiene mucho menos sentido. Es cómo escribir en el desierto.

UN NUEVO PROYECTO ARRIESGADO

  Tras acabar mis dos últimas novelas, Donde los hombres íntegros y Mi lugar en estos mundos , procesos ambos que me han llevado años, si en...